Tegucigalpa – Luego de conocerse el caso de una inmigrante hondureña de 24 años de edad que entró en labor de parto prematuro el 22 de febrero y dio a luz a un bebé muerto en el Centro de Detención de Port Isabel (PIDC), Texas, se conocieron de más procesos en las que las madres indocumentadas bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) perdieron a sus bebés.

– ICE considera que una muerte fetal no se considera “bajo custodia”, pero busca transparentar la información por lo que ha hecho pública la cifras de muertes de bebés.

La muerte hace unos días del bebé de una inmigrante hondureña de 24 años encarcelada en Texas, que nació sin vida, ha destapado que no es la única: 28 mujeres han visto malogrado su embarazo bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés), según ha informado la propia agencia federal al diario The Arizona Republic.

Entre octubre de 2017 y agosto de 2018, ICE encerró a mil 655 mujeres embarazadas, según ha comunicado. Al 31 de agosto de 2018, había 60 bajo custodia, de acuerdo a la publicación norteamericana que cita un comunicado que le envió el ICE.

En ese orden, en el año fiscal de 2017 (de octubre de 2016 a septiembre de 2017), hubo 10 embarazos malogrados; en el año fiscal de 2018 (de octubre de 2017 a septiembre de 2018), hubo casi el doble, 18, destaca la publicación.

Cabe señalar que el gobierno que preside Donald Trump endureció las condiciones de encarcelamiento de las inmigrantes embarazadas, cambiando las reglas que había aprobado el demócrata Barack Obama.

Ahora las indocumentadas en “dulce espera” ya no quedan en libertad debido a su delicado estado.

El pasado 22 de febrero, una mujer “catracha” de 24 años se puso de parto cuando iba a ser liberada de un centro de detención para inmigrantes en Port Isabel (Texas).

El niño nació allí mismo, muerto. La hondureña había sido detenida cuatro días antes en Hidalgo (Texas), y según las autoridades migratorias había dicho estar embarazada de seis meses, y había sido chequeada en un hospital.

Tras conocerse este caso se destapó que no es único y ahora se sabe de al menos 28 muertes de bebés en los últimos dos años.

La hondureña, cuya identidad no fue revelada, tenía seis meses de embarazo cuando fue detenida por parte de la Patrulla Fronteriza (USBP), poco antes de la medianoche del 18 de febrero, cerca de Hidalgo, Texas.

“Mientras estaba bajo la custodia de la USBP, fue llevada al hospital y su liberación fue autorizada el 21 de febrero después de recibir dos exámenes médicos”, indicó la agencia.

“En la tarde del 22 de febrero, fue transferida a la custodia de ICE para ser procesada para su liberación”, agregó.

Esa misma noche, añadió la oficina migratoria, mientras estaba siendo procesada para ser liberada, la “catracha” comenzó a quejarse de malestar abdominal y fue examinada por el Cuerpo de Servicio de Salud de ICE.

“Se llamó al director clínico y ordenó que la enviaran al hospital”, afirmó ICE, señalan reportes de prensa de Estados Unidos.

“Ella dijo que el bebé estaba por nacer. Ella entró en trabajo de parto prematuro, con 27 semanas de embarazo, y dio a luz a un bebé varón sin vida”, argumentó la agencia.

Aunque los médicos intentaron resucitar al recién nacido, los esfuerzos fueron en vano y fue declarado muerto en Centro Médico Valle Bautista, en Harlingen, Texas.

“La mujer permanece en custodia de ICE a la espera de su alta médica, tras de lo cual será liberada de la custodia”, afirmó la agencia, que agregó que una muerte fetal no se considera “bajo custodia”, pero busca transparentar la información.