Dos de los ocho centros de Southwest Key, en Arizona, arrendados por el gobierno federal para albergar menores inmigrantes separados de sus padres, fueron cancelados hoy por presuntos malos tratos del personal encargado. EFE/ARCHIVO

Phoenix (AZ) – Dos de los ocho centros de Southwest Key, en Arizona, arrendados por el gobierno federal para albergar menores inmigrantes separados de sus padres, fueron cancelados hoy por presuntos malos tratos del personal encargado.

Los albergues clausurados son Casa Phoenix y Hacienda Del Sol, este último en Youngtown, instalación que cobró notoriedad por un incidente de abuso sexual a mediados de septiembre que involucró al personal de servicio a y tres niños, y que fue confirmado por Southwest Key.

Aunque las circunstancias de ese incidente aún no han sido reveladas, las operaciones del albergue fueron suspendidas y el personal despedido a raíz del supuesto abuso.

«Son los primeros buenos pasos que hemos visto por parte de las autoridades para la protección de estos niños», dijo a Efe Ofelia Canez, activista y miembros de la Coalición de Familias Uncage & Reunite.

«Es el resultados de la presión que pusimos, junto con políticos y la comunidad para que le dieran solución a este problema», agregó.

Familias Uncage & Reunite es una de las organizaciones que exigió al estado de Arizona una revisión de las licencias otorgadas a Southwest Key, la empresa privada que administra cárceles para inmigrantes indocumentados, por incidentes graves ocurridos con menores.

También demandaron una compensación a las familias con honorarios y otros gastos relacionados con la reunificación; que se garantice la seguridad, la salud y el bienestar de todos los detenidos.

Como parte del acuerdo con el Departamento de Servicios de Salud de Arizona (ADHS, por sus siglas en inglés), Southwest Key también está obligado a pagar una multa de 73.000 dólares al estado, según lo anunciado hoy.

Además, se les impuso un «consultor de atención médica de terceros».

«La prioridad de DHS es mantener seguros a todos los niños bajo nuestro cuidado», dijo por su parte el portavoz de la institución de salud Jeff Eller, mediante un comunicado.

También se confirmó en el documento oficial que las otras seis instalaciones de Southwest Key en Arizona continuarán funcionando normalmente sin aceptar nuevos menores.