Varsovia – Algo más de 3.500 inmigrantes irregulares llegaron a la Unión Europea (UE) el pasado febrero a través de las cuatro principales rutas migratorias, un 58 % menos que en enero, fundamentalmente a causa de las malas condiciones en el Mediterráneo, según informó hoy Frontex.
Alrededor de 820 inmigrantes irregulares arribaron desde el norte de África a España por el Mediterráneo durante febrero de este año, un 80 % menos que en enero.
Sin embargo y debido a un gran número de llegadas registradas en enero, el total durante los primeros dos meses de 2019 superó los 4.900 inmigrantes, un 83 % más que en el mismo período del año pasado.
La mayoría de estos inmigrantes provenía de Marruecos, precisó la agencia encargada del control de las fronteras exteriores de la Unión Europea (UE) al analizar esa ruta, que incluye las llegadas a las costas del Mediterráneo occidental, entre ellas Ceuta y Melilla.
La ruta del Mediterráneo central hacia Italia registró 60 llegadas, en su mayoría desde Libia, un 70 % menos que en enero.
El total de llegadas a Italia en los dos primeros meses de este año fue de 260, un 95 % menos que en el mismo período de 2018, lo que confirma la tendencia descendente que ya comenzó en el verano de 2017.
Como en meses anteriores, la mayoría de estos inmigrantes provenía de Eritrea, Pakistán y Túnez.
La ruta del Mediterráneo oriental, con destino a Grecia, registró 2.250 llegadas en febrero, un 31 % menos que en el mes previo.
Sin embargo, y debido al alto número de llegadas registradas en enero, el número total de detecciones en esta ruta durante los dos primeros meses de 2019 fue de 5.500, un tercio más que en el mismo periodo de 2018.
Los inmigrantes sirios e iraquíes fueron los que mayoritariamente usaron esta ruta para llegar a Europa.
En cuanto a la ruta de los Balcanes Occidentales, el número de cruces fronterizos irregulares en febrero fue de 420, mientras que en los dos primeros meses de este año se elevó a 1.200, un 40 % más que en el mismo periodo del año anterior.
