Roma – Unos 100 migrantes llegaron a la isla italiana de Lampedusa acompañados por la Guardia Costera, mientras que desde hace nueve días se prohíbe la entrada en un puerto del barco de la ONG Sea Wath con 43 personas rescatadas frente a Libia.

Los medios de comunicación italianos informaron de la llegada durante la madrugada a la pequeña isla de 81 personas que habían sido interceptadas mientras iban en un bote y después llegaron otros dos grupos de 12 y 7 personas, que declararon proceder de Bangladesh, Senegal, Argelia, Siria, Marruecos, Túnez y Libia.

La Guardia de Finanzas italiana detuvo posteriormente a un pesquero libio al considerar que era la «nave nodriza» en la que habían viajado los migrantes.

En los últimos días se han producido una serie de desembarcos en la isla de Lampedusa en los que se cree que se ha utilizado esta técnica de llevar a los migrantes a bordo de un barco grande y después dejarlos en lanchas cerca de las costas italianas.

Mientras, el ministro del Interior italiano, Matteo Salvini, reiteró hoy que no se dejará desembarcar al barco de la ONG alemana Sea Watch con 43 personas rescatadas el pasado 12 de junio frente a las costas de Libia.

Incluso Salvini difundió a los medios una carta que ha enviado al primer ministro, Giuseppe Conte, en la que reitera su política de «puertos cerrados» y para solicitar a Holanda que se haga cargo del barco ya que lleva bandera de este país.

El pasado 12 de junio, 53 personas, entre ellas 9 mujeres, 39 hombres, 2 niños pequeños y 3 menores no acompañados, fueron rescatados por el Sea Watch 3 cuando iban en un bote de goma y tres días después, la Guardia Costera italiana realizó una inspección médica a bordo y decidió la evacuación de diez personas por motivos médicos.

Esta noche han desembarcado 81 personas en Lampedusa procedentes de Libia, mientras los 43 náufragos del Sea Watch siguen bloqueados en el mar desde hace 9 días. ¿Cuánto debe durar este hipócrita e inhumano teatro?», escribió la ONG en su cuenta en Twitter.

El Sea Watch se encuentra en aguas internacionales frente a las costas de Lampedusa, ya que Interior ordenó la prohibición al barco de entrar en aguas territoriales italianas, como está previsto en el decreto de seguridad que el Ejecutivo aprobó hace unos días y que contempla multas de hasta 50.000 euros a los barcos humanitarios que rescaten migrantes sin autorización.