Toronto (Canadá) – La ministra de Inmigración y Expatriados de Egipto, Nabila Makram, ha amenazado a los egipcios que «hablen contra Egipto» en el extranjero, según un vídeo filmado en Canadá y dado a conocer hoy.

En el vídeo, que recoge un discurso pronunciado por Makram el pasado domingo en una localidad cercana a Toronto ante un grupo de egipcios residentes en Canadá, se observa a la ministra egipcia preguntar en árabe «¿qué pasará a quién hable contra Egipto en el extranjero?».

La ministra responde a su propia pregunta diciendo: «será rebanado», al mismo tiempo que gesticula con su mano izquierda a la altura del cuello en lo se han interpretado como una amenaza a los disidentes de Egipto en el extranjero.

Parte del público reaccionó a las palabras de Makram con risas mientras que otros aplaudieron a la ministra.

«Sólo tenemos un país» explicó con antelación la ministra quien añadió que «no podemos pronunciar palabras negativas contra (Egipto) en el extranjero».

Makram viajó a Canadá a invitación de un político conservador de la provincia de Ontario de origen egipcio, Sheref Sabawy, y pronunció varios discursos ante miembros de la comunidad egipcia en las ciudades de Toronto y Montreal.

Un portavoz de la Coalición Egipcio-Canadiense para la Democracia, un grupo crítico al régimen egipcio dirigido por el presidente Abdelfatah Al Sisi, declaró a la radiotelevisión pública canadiense, CBC, que las palabras de Makram son «una amenaza directa» contra los egipcios disidentes en todo el mundo.

Por su parte, Sabawy afirmó que las palabras de Makram han sido «sacadas de contexto». La ministra también ha señalado en un mensaje publicado en su página de Facebook que sus palabras no estaban dirigidas contra «disidentes».

Recientemente Amnistía Internacional (AI) denunció la «represión devastadora» que sufren los grupos defensores de los derechos humanos en Egipto desde hace años.

Al mismo tiempo, organizaciones de derechos humanos han denunciado la reciente reforma constitucional en el país árabe por perpetuar a Al Sisi en el poder y también por considerar que elimina la separación de poderes en Egipto y los concentra en las manos del jefe del Estado.