Fotografía del departamento de vehículos de motor (MVD) de Nuevo México. EFE/Juan Labreche/Archivo

Phoenix (AZ) – Tras una larga lucha de activistas y grupos pro inmigrantes, una nueva licencia de conducir «estándar» está al alcance desde este martes de personas en Nuevo México que no puedan justificar su estatus legal, según celebraron los promotores de la medida en una rueda de prensa.

«Ya empezaron a tramitar las licencias estándar o licencias de Nuevo México, que serán de gran beneficio a este estado bastante plural, donde contamos con comunidades muy diversas, entre ellas la hispana», dijo a Efe Gabriela Ibáñez Guzmán, asesora legal de la organización Somos Un Pueblo Unido.

El Departamento de Impuestos e Ingresos (IRS) de Nuevo México, junto con Somos Un Pueblo Unido y otros grupos pro inmigración, realizaron este martes una conferencia de prensa para anunciar la implementación la nueva «Licencia de Conductor Estándar» del estado, amparada por la nueva Ley SB 278.

«Llevamos muchos años tratando de cambiar el sistema de licencias, pues hubo algunos cambios en 2016 que crearon confusión. Con esta nueva ley, se disipan las dudas y regresamos a lo más simple», explicó Ibáñez.

La jurista recordó que, en 2016, la legislatura estatal votó a favor de un sistema de licencias de conducir en base a dos niveles, una licencia o tarjeta de identificación (Real ID) y una Tarjeta de Autorización para Conducir (DAC) para inmigrantes indocumentados o ciudadanos que no desean aplicar bajo el programa de Real ID.

Ibáñez detalló que bajo la ley anterior, Nuevo México emitía a los residentes licencias de conducir que cumplen con las regulaciones de una identificación válida, mientras que los inmigrantes indocumentados solo recibían «permisos de conducir», o sea, una tarjeta de autorización válida para conducir a lo largo del estado.

Pero con la nueva ley, añadió, se simplifica el proceso con un permiso único y se elimina el requisito de huellas dactilares, algo que de acuerdo con activistas «invadía la privacidad» de los ciudadanos e inmigrantes indocumentados.

La nueva norma permite a los titulares renovar sus licencias cada cuatro u ocho años y acaba con los períodos cortos de renovación. Además, garantiza que el nuevo permiso sea igual de aceptado que un Real ID.

«A partir de ya cualquier residente de Nuevo México puede ir al DMV (Departamento de Motores y Vehículos) y renovar su licencia por la estándar o tramitar su nueva licencia de forma sencilla, nosotros ya fuimos a renovarla», comentó Ibáñez.

A principios de abril, la gobernadora estatal, Michelle Lujan Grisham, firmó esta medida que además de simplificar trámites no estimula la discriminación a causa de la situación migratoria del solicitante.

Activistas recordaron que la firma se logró tras ocho años de choques políticos, dos demandas contra la agencia de transporte estatal DMV por prácticas ilegales, y el trabajo de organizaciones de derechos civiles que lucharon para un proceso «no discriminatorio».