Tegucigalpa – El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, se mostró hoy confiado en que Estados Unidos aprobará una nueva ampliación del Estatus de Protección Temporal, (TPS), que permite trabajar en ese país a unos 57.000 hondureños.

«El TPS está en la mesa de conversaciones con Estados Unidos. Tengo la confianza de que será renovado por el Gobierno del presidente Donald Trump», subrayó Hernández, según medios del país centroamericano.

La canciller hondureña, María Dolores Agüero, dijo a finales de mayo que la solicitud de una nueva ampliación del TSP será formalizada por Honduras ante las autoridades de Estados Unidos en julio próximo.

Hernández enfatizó que es «una decisión muy soberana» de Estados Unidos aprobar la decimocuarta ampliación por otros 18 meses del TPS que beneficia a 56.790 hondureños y vence el 5 de enero de 2018.

Sin embargo, señaló que las autoridades hondureñas seguirán «trabajando por los migrantes hondureños», aunque aseguró que respetarán la decisión de Estados Unidos.

«Los argumentos que han servido por trece ocasiones para renovar el TPS en el caso de Honduras han sido argumentos muy poderosos», subrayó el presidente Hernández.

El secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kelly, dijo el pasado jueves que los inmigrantes que han vivido y trabajado en su país bajo el TPS quizá deberían empezar a pensar en volver a sus países.

El Gobierno de Estados Unidos otorgó el TPS, que les permite trabajar legalmente, a los refugiados de Honduras que llegaron al país antes de finales de 1998, tras el huracán Mitch, que azotó ese año Centroamérica.

Alrededor de un millón de hondureños viven legal o ilegalmente en Estados Unidos, de donde envían remesas familiares que el año pasado alcanzaron unos 3.770 millones de dólares, según datos oficiales.