Tegucigalpa – El retorno de inmigrantes a Honduras disminuyó en 3 por ciento en los primeros dos meses del 2019, respecto al mismo periodo de tiempo del año 2018, según datos oficiales.

-Pese al fluctuante número de hondureños deportados, los inmigrantes continúan enviando remesas familiares al país centroamericano que reporta un crecimiento de 17 % en enero.

Estadísticas de la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional de Honduras señalan que en el primer bimestre de 2018 un total de 9 mil 792 hondureños fueron deportados mientras que en el presente año suman 9 mil 506 los repatriados.

En ese orden, el Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (Conmigho) señala en su informe digital que desde el 1 de enero hasta el 22 de febrero suman 9 mil 506 los hondureños deportados, una disminución de 2.9 % respecto a 2018.

El informe detalla que las autoridades migratorias de Estados Unidos deportaron a 4 mil 563 hondureños, entre ellos 37 menores de edad.

En el renglón de infantes deportados se incrementa a mil 372 cuando se habla de las repatriaciones desde México.

Este último país deportó en total en enero y febrero a 4 mil 911 hondureños, manteniendo así la hegemonía como país que más “catrachos” deporta en la actualidad.

Desde países de Centroamérica, añade el informe, suman 32 los hondureños deportados, 10 infantes entre ellos.

Es oportuno mencionar que en estos datos oficiales no se incluyen los retornos de hondureños que regresaron al país luego de emprender la ruta migratoria en caravana hacia EE.UU.

El pasado 13 de octubre de 2018 y 14 de enero de 2019 miles de hondureños emprendieron la travesía desde la norteña ciudad de San Pedro Sula, la segunda más importante de Honduras.

No obstante, miles de connacionales retornaron de manera voluntaria pero los datos estadísticos son manejados oficialmente como una lista aparte.

Este dato estuvo disponible al público el año anterior pero en el presente es un dato solo manejado por las autoridades de la Cancillería.

En cualquiera de los casos los hondureños continúan emigrando por las mismas razones: falta de empleo y generación de oportunidades, el huir de la violencia y la reunificación familiar.

Pese al fluctuante número de hondureños deportados estos continúan enviando remesas familiares al país.  

En ese sentido, las remesas familiares enviadas a Honduras en enero pasado sumaron 401.7 millones de dólares, un 17.4 % más a los 342.1 millones de dólares del mismo mes de 2018.

Los envíos de dinero al país centroamericano aumentaron 59,6 millones de dólares con relación al primer mes de 2018, indicó el Banco Central de Honduras (BCH) en un informe.

De acuerdo con datos oficiales, el 80 % de las remesas enviadas al país centroamericano provienen de Estados Unidos.

En todo 2018 las remesas, que representan más del 18 % del producto interno bruto (PIB), sumaron más de 4 mil 800 millones de dólares, indicó el organismo hondureño.