Tegucigalpa- La falta de diálogo y consenso, y un clima de insultos y descalificaciones prevalece tanto en las redes sociales como en los espacios donde se debería fomentar el diálogo, apuntó el vocero de la Conferencia Episcopal, el padre Juan Ángel López.

El padre enfatizó que la crisis que atraviesa el  país es  institucional y moral.

«Lamentablemente, desde hace mucho tiempo estamos viviendo una crisis no solo institucional sino también moral. Aquí no hay diálogo ni capacidad de buscar consensos. Cualquier opinión se convierte en un insulto inmediato en las redes sociales», expresó López. Criticó a quienes, en lugar de promover el diálogo, se convierten en detractores, atacando a quienes no comparten sus opiniones.

El Padre López hizo un llamado a la reflexión y al respeto, enfatizando que tener diferentes ideas no debería convertir a nadie en enemigo. «Cada quien tiene derecho a tener sus propias ideas y considerar cómo avanza el país, pero eso no significa que quien no piensa igual sea su enemigo y deba ser aniquilado con insultos y falta de respeto», añadió.

La Conferencia Episcopal ha insistido en la necesidad del diálogo y el encuentro, a pesar de las críticas. «Aunque nos critiquen y cuestionen, continuaremos abogando por el diálogo. Es importante que todos pongamos la mano en la conciencia y pensemos con un sentido humanitario. No estamos avanzando, estamos retrocediendo debido a que seguimos ideologías de pensamiento único», reflexionó el sacerdote en declaraciones a HRN.

Seguidamente expuso que el último mensaje de la Conferencia Episcopal se da en el contexto donde se celebran 350 años de las apariciones del Sagrado Corazón de Jesús.

En ese sentido el padre Juan Ángel, subrayó la importancia de actuar con el corazón de Jesús, buscando siempre escuchar y no atacar a quien piensa diferente. «El Sagrado Corazón de Jesús repara lo irreparable, y eso es lo que necesitamos en Honduras. Para Dios no hay nada imposible», afirmó, invitando a la oración como punto de partida para la acción.

El vocero también abordó otros problemas que afectan al país, como el deterioro ambiental y la crisis mundial. Recordó que en las últimas semanas «hemos vivido bajo una capa de humo contaminado debido a incendios provocados. Hay que partir de la oración porque desde el punto de vista humano, esto no se va a solucionar”.

En otro apartado de su reflexión el padre apuntó que los políticos se emborrachan de poder y pierden el horizonte, aclarando que eso no es actual, sino que desde siempre.

Seguidamente, López, subrayó la necesidad de humildad y de actuar con el corazón del Señor, para un cambio en el pueblo hondureño.

En su mensaje final, destacó que Honduras no pertenece a ningún partido político específico, sino a todos los hondureños. «Todos tenemos que poner de nuestra parte, cada quien, desde su situación, para construir juntos esta nación», concluyó.