Banjul – El jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el presidente de Gambia, Adama Barrow, sellaron este miércoles el incremento de la colaboración entre ambos países para fortalecer las vías legales de migración y luchar contra las mafias que trafican con personas.
Sánchez y Barrow se reunieron en el Palacio Presidencial de Banjul con motivo de la visita del primero al país africano, la primera que realiza un presidente del Gobierno español.
La visita se enmarcó en la gira de Sánchez por tres países africanos (los otros dos son Mauritania y Senegal) y que tiene como eje central el refuerzo de la cooperación para hacer frente a los movimientos migratorios irregulares.
Gambia es uno de los países subsaharianos de los que parten cayucos con personas que intentan llegar a las costas canarias.
La declaración suscrita por ambos países con motivo de la visita de Sánchez sella el compromiso de seguir impulsando una migración segura, ordenada y regular en un entorno de seguridad y protección de bienes y personas.
Hubo un reconocimiento a la positiva contribución de los migrantes al crecimiento inclusivo y al desarrollo sostenible de sus respectivos países y el acuerdo de seguir colaborando en un enfoque integral para la gestión de los flujos migratorios que garantice un trato justo y humano de los migrantes.
Para ello acordaron seguir coordinando esfuerzos con el fin de abordar las causas fundamentales de la migración irregular, trabajar para fortalecer las vías legales y luchar contra las redes de tráfico de personas.
En ese contexto, durante la visita se firmó un memorando en materia de migración circular por el que Gambia pasa a formar parte de la lista de países desde los que llegan trabajadores a España para realizar trabajos estacionales y, a su término, volver a su país.
Sánchez y Barrow, según fuentes de la delegación española, resaltaron la importancia de ese acuerdo.
España y Gambia coincidieron en la necesidad de identificar objetivos comunes en la lucha contra el terrorismo, la radicalización y la delincuencia organizada, incluyendo el tráfico y la trata de personas, y reiteraron la determinación de reforzar las consultas y la cooperación mutuas en todos los ámbitos pertinentes.
Los dos países firmaron igualmente un acuerdo sobre cooperación en el ámbito de la seguridad y la lucha contra la delincuencia.
Además de repasar diversos asuntos de política internacional como la guerra en Ucrania y en Gaza, Sánchez y Barrow abogaron también por impulsar las relaciones bilaterales en sectores de interés mutuo como el económico y comercial, el cambio climático, la salud y la igualdad de género, las energías renovables, la promoción del turismo, la educación y la enseñanza de idiomas.
Respecto a las relaciones comerciales, que en 2023 alcanzaron los 29 millones de euros, acordaron aumentarlas así como promover un entorno favorable a la inversión y la participación del sector privado en proyectos de interés prioritario.
En este sentido destacaron la experiencia y el conocimiento técnico de las empresas españolas para contribuir al desarrollo sostenible de Gambia en sectores clave como las infraestructuras, la energía, el aprovechamiento de los recursos hídricos o la digitalización.
Durante el encuentro se puso de manifiesto que España acoge el mayor colectivo de gambianos fuera de su país, con un total de 25.000 residentes legales.
La reunión entre el presidente del Gobierno español y el jefe de Estado de Gambia fue posterior a una visita de Sánchez en el puerto de Banjul a los efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil que cooperan en el país africano contra la migración irregular.
Desde el Palacio Presidencial de la capital gambiana el jefe del Gobierno español se trasladó al aeropuerto para emprender viaje a Senegal, última etapa de su gira africana.
