Tegucigalpa – La Iglesia Católica de Honduras reprochó hoy la polarización de la sociedad y pidió escuchar y amar a Dios, y al prójimo.
Así lo señaló hoy el arzobispo de Tegucigalpa, José Vicente Nácher en la homilía dominical donde en primera instancia reprochó la polarización de la sociedad.
“Entonces lo que hace este mundo es que no reconoce al otro digno de ser amado y dice ese no o ese es nuestro enemigo, eso lo vemos a diario en un mundo y una sociedad cada vez más polarizada”, reflexionó.
No amar es negar al otro para afirmarme a mí mismo, si darme cuenta de que si no amo al hermano es porque en el fondo no conozco el amor de Jesucristo, agregó.
Amar mi propio interés por encima de los demás es amarme a mí mismo como si yo fuera el fin o Dios y no lo soy, apuntó.
Zanjó que solo hay un Dios y la humanidad debe ser consciente de ello. Dios amó primero, resaltó.
Para estar cerca del reino escuchemos y amemos a Dios primero, razonó.
“Escuchemos y amemos a nuestros hermanos”, concluyó el religioso que oró por la paz en Honduras.
A continuación Departamento 19 reproduce la lectura del día tomada del santo Evangelio según San Marcos
Mc 12, 28-34
En aquel tiempo, uno de los escribas se acercó a Jesús y le preguntó: “¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?” Jesús le respondió: “El primero es: Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es el único Señor; amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas. El segundo es éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay ningún mandamiento mayor que éstos”.
El escriba replicó: “Muy bien, Maestro. Tienes razón, cuando dices que el Señor es único y que no hay otro fuera de él, y amarlo con todo el corazón, con toda el alma, con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, vale más que todos los holocaustos y sacrificios”.
Jesús, viendo que había hablado muy sensatamente, le dijo: “No estás lejos del Reino de Dios”. Y ya nadie se atrevió a hacerle más preguntas.