Tegucigalpa – Honduras sin duda alguna es un país con una economía dependiente de las remesas, y es un tema que definitivamente se ve impactado por el tema político en Estados Unidos y dependiendo de los resultados la desaceleración podría incrementar advierten los expertos.
-Honduras es un país “remesodependiente”, por lo que lo que suceda en EEUU es crucial.
-En la más reciente revisión de Programa Monetario el BCH, advirtio crecimiento más lento de remesas.
El director de investigaciones económicas del Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (FOSDEH), Mario Palma, advirtió sobre una desaceleración en el crecimiento de las remesas que llegan a Honduras, fenómeno que considera crucial tanto a nivel macroeconómico como microeconómico.
Según Palma, las remesas representan actualmente el principal rubro de captación de divisas en el país, y los meses de mayor repunte suelen ser mayo y diciembre, impulsados en gran parte por un sentimiento de apoyo de los migrantes hacia sus familias.
El Banco Central de Honduras (BCH), en su última revisión del Programa Monetario, también destacó esta desaceleración en la captación de remesas. Palma atribuye la desaceleración principalmente al contexto electoral en Estados Unidos, país que concentra el 80% de las remesas que recibe Honduras, lo que ha afectado la cantidad de dinero que los hondureños en el exterior envían a sus familias.
A nivel microeconómico, el impacto de esta desaceleración es significativo. Las estadísticas indican que uno de cada cuatro hogares en Honduras depende de las remesas, y para muchos de estos, estas transferencias representan entre el 45% y el 50% de su ingreso total, subrayando la vulnerabilidad de una economía «remesodependiente».
Según datos del BCH, entre enero y septiembre de 2024, los hondureños recibieron 7.194,3 millones de dólares en remesas, un incremento del 5% respecto al mismo período de 2023.
A lo largo de 2023, el país captó un total de 9.177,5 millones de dólares en remesas, un 5,7% más que el año anterior. Con esta tendencia, el BCH proyecta que el total de remesas alcance los 9.500 millones de dólares al cierre de 2024, cifra que, aunque representa un crecimiento, muestra señales de desaceleración en comparación con años anteriores.
“La economía hondureña depende de las remesas y cualquier cambio en su flujo impacta directamente en la economía de las familias y en las finanzas del país”, afirmó Palma.
Conviene que gane Trump o Kamala
El economista hondureño José Luis Moncada ha analizado las posibles repercusiones que tendría en Honduras una eventual victoria de Donald Trump en las próximas elecciones de Estados Unidos.
Según Moncada, las recientes declaraciones del expresidente evidencian su intención de reducir la asistencia técnica y ayuda económica para los países del Triángulo Norte de Centroamérica: Guatemala, El Salvador y Honduras.
“Trump tiene una posición radical sobre los inmigrantes, lo que podría significar que muchos hondureños sin regularizar en Estados Unidos, se podrían ver forzados a regresar”, explicó Moncada. Esta medida podría repercutir en el flujo de remesas, un pilar importante para la economía hondureña, que cada año ha crecido gracias a los envíos de quienes residen en el extranjero.
Elecciones en EEUU determinarán el rumbo de la cooperación con Honduras y la migración
En un análisis sobre el impacto de las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, el analista político hondureño Luis León señaló que la victoria de Kamala Harris o Donald Trump podría definir el futuro de la cooperación y las políticas migratorias de EEUU hacia Honduras y Latinoamérica.
Según León, un 52% de los hondureños residentes en Estados Unidos prefieren la continuidad de un gobierno demócrata con Harris, lo que, a su juicio, podría significar la expansión de iniciativas de cooperación con los países latinoamericanos.
“Un gobierno demócrata sigue siendo una opción más amigable para la región, en especial para Honduras, que enfrenta graves problemas socioeconómicos”, indicó el analista, subrayando que los demócratas han mostrado históricamente mayor apertura para apoyar a países en desarrollo.
Por otro lado, León destacó que el 48% de los migrantes hondureños se inclina hacia Donald Trump, quien representa una visión más proteccionista. “Esto muestra cómo algunos migrantes comienzan a alinearse más con intereses internos de EEUU, inclinándose por una agenda republicana que resalta la supremacía y seguridad económica del país”, explicó.
Para León, un eventual triunfo de Trump podría implicar el regreso a políticas de contención migratoria, como las implementadas en 2018 y 2019, que incluyeron la construcción de un muro y la limitación de programas de apoyo a América Latina. Esto, sostuvo, “evidencia la postura de Trump de restaurar el poderío estadounidense como primera potencia mundial, lo cual probablemente incluya un endurecimiento en las políticas migratorias y una reducción de la cooperación hacia la región”.
Con una de las tasas de migración más altas de Centroamérica, Honduras observa las elecciones en EEUU con gran expectativa. «Para nuestra región, estas elecciones son decisivas, pues determinarán si continuaremos recibiendo apoyo o si enfrentaremos políticas más estrictas, coinciden los analistas.