Wahington- El grupo de milicias de derecha estadounidense United Constitutional Patriots ha intensificado sus actividades y ha empezado a detener esta semana a familias enteras de migrantes en el estado sureño de Nuevo México, cerca de la frontera con México, para luego entregarlos a los agentes de la Patrulla Fronteriza, acción que es calificada de inaceptable por la gobernadora del estado, Michelle Lujan Grisham.
Durante la semana los miembros del grupo privaron de la libertad a alrededor de 300 personas, entre ellos niños pequeños, cerca de la ciudad de Sunland Park (Nuevo México, EE.UU.), publicando luego videos y fotos de sus acciones en redes sociales.
Ante la situación, la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles en Nuevo México (ACLU, por sus siglas en inglés) denunció los hechos en una carta dirigida a la gobernadora del estado, Michelle Lujan Grisham, y al fiscal general Héctor Balderas, pidiendo que investiguen la detención ilícita de cientos de migrantes en la frontera sur.
“Esto no tiene cabida en nuestro estado: no podemos permitir que vigilantes racistas y armados secuestren y detengan a las personas que buscan asilo”, escribió el organismo.
Balderas ha criticado el actuar de los llamados patriotas y ha declarado a través de un comunicado que “estos individuos no deberían emprender intentos de ejercer la autoridad reservada para las fuerzas de seguridad”.
La gobernadora ha subrayado que es “totalmente inaceptable” que las familias de migrantes “puedan ser intimidadas o amenazadas de cualquier manera o forma” cuando llegan a la frontera estadounidense.
“No hace falta decir que los ciudadanos comunes no tienen autoridad para arrestar o detener a nadie”, declaró.
Por su parte, Jim Benvie, miembro de United Constitutional Patriots, afirmó a The New York Times que sus acciones fueron legales y se refirió a la detención como a un “arresto civil verbal“, agregando que solo tratan de “apoyar a la Patrulla Fronteriza y mostrarle al público la realidad en la frontera”. “Si estas personas siguen nuestras órdenes verbales, los retenemos hasta que viene la Patrulla Fronteriza”, declaró Benvie.