Miami – La congresista estadounidense Debbie Mucarsel-Powell pidió este viernes la renuncia del secretario del Departamento de Salud (HHS, por su sigla en ingléx), Alex Azar, por la crisis humanitaria que afecta a niños inmigrantes separados de sus familias.
La demócrata lamentó la muerte de niños inmigrantes en el país -al menos siete según diversas fuentes- y se refirió especialmente a las condiciones del albergue para menores de Homestead, en el sur de Florida, al que según dijo el HHS le ha negado «varias veces» la entrada para «supervisar» el bienestar de los menores.
Al hacer cumplir las «políticas desastrosas» del presidente Donald Trump, el HHS, al mando de Azar, «ha demostrado que no puede ser un cuidador confiable para los niños y menores bajo su custodia. Por estas razones, el secretario Azar debe renunciar», manifestó la congresista demócrata.
«El centro de detención de niños en Homestead es un símbolo de todo lo que está mal con la Administración Trump», agregó en un comunicado la congresista del distrito 26, que incluye a Homestead, una ciudad del condado Miami-Dade.
Lamentó además que aún no ha recibido una respuesta oficial que aclare si el exjefe de gabinete de Trump John Kelly «desempeñó un papel en la obtención de un contrato multimillonario para una empresa que se beneficia de la detención y el sufrimiento de los niños».
La congresista dijo además que «el HHS ha desafiado la ley al negar a los miembros del Congreso la capacidad de cumplir con nuestro deber constitucional de supervisión».
Mucarsel-Powell subrayó que «numerosos niños han muerto» bajo la custodia de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR), que depende del HHS, y que «han sido recortadas» necesidades básicas como educación, ejercicio y servicios legales.
«Las políticas de inmigración de la administración Trump han destruido el tejido moral de nuestro gobierno a responder a una crisis humanitaria», manifestó.
Criticó el estancamiento en el procesamiento de los casos de asilo mientras los inmigrantes permanecen en México, la separación de familias y el «desvío» de fondos por parte de varias agencias gubernamentales de los fondos para construir un muro «medieval e ineficaz» en la frontera con México.
«Nuestra crisis de inmigración solo ha empeorado», manifestó.
Además criticó que el gobierno de Trump no ha «desarrollado o compartido públicamente un plan de evacuación (de los niños inmigrantes) y reubicación de huracanes en una región propensa a desastres naturales».
En el pasado mes de mayo las autoridades detuvieron a 132.887 personas por entrar ilegalmente al país, casi tres veces más que los 51.862 del año pasado.
De los detenidos por cruzar ilegalmente, 11.507 eran menores sin la compañía de un familiar adulto y 84.542 formaban parte de grupos de familias en los que hay al menos un menor de edad.