Los Ángeles – Los «soñadores» recibieron este viernes con «esperanza» la decisión del Tribunal Supremo de ver en su próximo período de sesiones la situación de DACA, lo que les permitirá prorrogar esta protección hasta el próximo año y les dará tiempo para fortalecer la lucha.
«Seguimos con esperanza de ganar nuestro caso en la Corte Suprema, si los jueces se apegan a la Constitución se darán cuenta que las razones que expone el Gobierno de Trump para anular la orden ejecutiva están basadas en discriminación», dijo a Efe la abogada beneficiada por el programa de Acción Diferida (DACA) Dulce García.
García, uno de los cientos de miles de inmigrantes indocumentados llegados al país de niños acogidos a ese programa y conocidos como «soñadores», demandó junto a otras cinco compañeras en California al Gobierno del presiente Donald Trump, en uno de los tres casos que los jueces del Supremo ordenaron unificar en uno solo.
El alto tribunal informó hoy que escuchará los argumentos en su próximo periodo de sesiones, que comienza en octubre.
García explicó que esperan que la decisión sobre el destino de más de 700.000 jóvenes indocumentados amparados por DACA se dé la próxima primavera, justo cuando la campaña para las elecciones de noviembre de 2020 debe estar comenzando a acelerarse.
«Incluso si la Corte decidiera contra nosotros, demostraría que está sesgada políticamente y mancharía la separación que debe tener con las otras ramas judiciales», subrayó García.
Para Luis Cortes, un abogado protegido por DACA y que forma parte del equipo legal que representa el caso de García, la decisión del Supremo los tomó por «sorpresa».
«Estadísticamente es muy raro que la Corte Suprema anuncie que escuchará un caso en el verano, este tiempo de lo general es para dar fallos, es muy raro en la historia de la Corte hacer esto, así que nos sorprendió», apuntó Cortes en entrevista con Efe.
Cortes asegura que el equipo legal está preparado para demostrar la inconstitucionalidad de la decisión del Gobierno Trump al poner fin al programa en septiembre de 2017.
Además, el abogado cree que independientemente de la decisión que el Alto Tribunal tome, la administración Trump no va a tener más tiempo «para jugar con el tema».
«Somos (los ‘soñadores’) un rompecabezas político, pero esta vez el presidente no va a poder usarnos como una pieza para intercambiarnos por dinero para un muro o para otras cosas, no tiene el beneficio del tiempo» insistió Cortes, quién tiene ejerces la abogacía en Seattle (WA).
Por su parte García, que ejerce en la frontera de San Diego, asegura que la decisión del Tribunal Supremo de escuchar el caso le dará más poder al movimiento de los «soñadores» y sus peticiones de lograr una legalización con camino a la ciudadanía.
«Nuestra lucha se va a encaminar al Congreso para lograr de una vez por todas una legalización para todos los once millones de indocumentados», explicó García.
El estratega republicano en California Luis Alvarado coincide con las opiniones de Cortes y García en que los soñadores seguirán siendo usados como «arma política» en las elecciones de 2020, y que la decisión del Supremo los pondrá nuevamente en la mira de los partidos.
No obstante, Alvarado aclaró que la fuerza de estos jóvenes se encuentran en estados demócratas como California y Nueva York, que no están en la pelea política, y que la lucha debería apuntar a estados como Florida.
En ese sentido, la presidenta interina de Latino Victory Project, Melissa Mark-Viverito, subrayó que no se puede confiar en que «la Corte Suprema haga lo que es correcto para nuestra comunidad, es por eso que 2020 será la elección más importante de nuestra vida»
«Hay mucho en juego y mucho que perder. Debemos luchar y elegir líderes que defiendan nuestros valores y no se disculparán cuando se trata de proteger a los más vulnerables de nuestra comunidad», sentenció Mark-Viverito.
Mientras llega el tiempo de las elecciones, la soñadora Gabriela Hernandez, miembro de la organización CASA Maryland, dijo a Efe que podrá renovar su permiso de trabajo que vence en octubre próximo.
«Voy a ganar dos años más y seguir trabajando, tengo esperanzas de que los jueces de la Corte estén del lado de nosotros y de las leyes de este país», concluyó la activista.