Tijuana (México) – Un grupo de ONG pidieron el lunes a las autoridades no perseguir a los migrantes que viven en albergues con la Guardia Nacional, el nuevo cuerpo de seguridad creado por el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Desde el albergue Juventud 2000, ubicado en la colonia (barrio) Zona Norte del centro de esta fronteriza ciudad mexicana, activistas pro migrantes señalaron que las acciones actuales del Gobierno Federal deben estar acompañadas de programas de regularización de documentos.
José María García Lara, director del mencionado albergue, comentó a medios su preocupación por la poca información que se ha proporcionado sobre las acciones del actual gobierno que encabeza el presidente López Obrador.
En días pasados, dijo, algunos agentes del Instituto Nacional de Migración (Inami) con apoyo de elementos del Ejército Mexicano, estuvieron haciendo vigilancia en algunos albergues poniendo nerviosos a los migrantes que todavía no cuentan con documentación.
García Lara lamentó que este tipo de actos vengan a entorpecer la confianza que algunos migrantes ya tienen en las autoridades, por lo que pidió no generar más confusión a través de la presión y el hostigamiento.
«Si nosotros no alzamos la voz no va a parar, si bien hacen rondines al rato van a querer entrar a los albergues, lo cual no lo vamos a permitir porque estamos para protegerlos hasta cierto punto con reglas», señaló el director del albergue, que consideró que el Inami debe servir para acercase a los migrantes y ayudarles a tramitar documentos, y no para «acosar» a los migrantes.
El arzobispo de la Arquidiócesis de Tijuana, Francisco Moreno Barrón, señaló el pasado 30 de junio antes de su misa dominical que la Guardia Nacional -cuyo despliegue en la frontera se estima inminente- es un tema polémico, pero pidió reconocer su labor siempre que se haga con respeto.
«Nosotros tenemos que rescatar el valor y la riqueza de tener a esta gente (Guardia Nacional), pero hacer un llamado para que el trato a la ciudadanía, particularmente con los migrantes sea un trato digno y de respeto», dijo el líder religioso.
Positivamente, Ingrid Contreras, migrante hondureña que actualmente es atendida en el Albergue Ágape Nueva Misión, dijo sentirse tranquila ante la llegada de los agentes de la Guardia Nacional pues ella y sus 6 hijos cuentan con visa brindada por México.
«Siento que soy parte de México en cierta forma, tantito, con esa visa humanitaria puedo venir cuando quiera a Tijuana», manifestó sonriente y reconoció que la documentación le fue otorgada sin problemas por tener 8 meses de embarazo.
Al día de hoy no se han anunciado todavía los trabajos oficiales por parte de la Guardia Nacional en la ciudad de Tijuana, por lo que asociaciones y autoridades locales se mantienen con la incertidumbre de en qué momento llegarán.