Katmandú.- Unos 35.000 nepalíes, la mayoría adolescentes, fueron víctimas de la trata de personas en 2018-2019 y cerca de 1,5 millones más corren el riesgo de serlo, denunció hoy la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Nepal en un informe.
La activista y miembro de la comisión Mohna Ansari indicó durante la presentación del documento que la investigación identificó a las mujeres jóvenes como las más vulnerables a la trata de personas destinada al abuso sexual, la explotación y el tráfico.
De acuerdo a los investigadores de la entidad independiente, la mayoría de las víctimas son adolescentes entre 13 y 19 años de zonas rurales del país.
«La trata de personas ha sido un problema mundial y sigue siendo un gran desafío para Nepal. A pesar de los esfuerzos, la vulnerabilidad de sus ciudadanos hacia la trata de personas no ha disminuido», dijo Ansari.
El estudio, que recoge datos de las autoridades nepalíes, señala que 12.000 personas fueron víctimas del tráfico de seres humanos para trabajo en el extranjero, 12.000 en el sector de trabajo infantil y 7.800 para la prostitución y explotación sexual.
El organismo identifica también a 3.200 personas reportadas como desaparecidas.
La principal ruta de tráfico de personas es, según el informe, a través de la frontera entre Nepal y la India, donde son llevadas para comercio sexual, trabajo forzado y trabajo doméstico, o trasladadas a un tercer país.
La comisión detalló que la investigación contiene información de trata de personas correspondiente a solo 53 de las 77 oficinas de policía de distrito que suministraron datos.
Los traficantes actúan en grupo y captan con falsas promesas a sus víctimas, con las que suelen cruzar la frontera de día hacia la India o China, principalmente con destino al Golfo Pérsico en el caso de las mujeres.
