Roma,- El barco Ocean Viking, de la ONG SOS Méditerranée, acoge a 374 inmigrantes salvados en el Mediterráneo en los últimos tres días y el último rescate fue esta noche, el de 106 personas intoxicadas por el humo de la patera en la que viajaban.
El barco humanitario avistó la pasada noche una embarcación neumática en apuros y sobrecargada de personas. De hecho dos de las personas que viajaban en ella habían caído al agua, si bien fueron inmediatamente salvadas por los operarios de la ONG.
Finalmente se salvó a 106 inmigrantes en aguas internacionales, a unas 28 millas (unos 45 kilómetros) de la costa de Libia, de donde zarpa la mayoría de los migrantes hacia Italia a través de la ruta del Mediterráneo central, una de las más peligrosas del mundo.
La mayoría de los socorridos presentaba una fuerte intoxicación por el humo del carburante de la patera en la que viajaban.
Esta ha sido la tercera operación de la nave humanitaria en los últimos tres días y, en estos momentos, acoge a un total de 374 personas salvadas en el mar.
Ayer viernes había rescatado a 149 que viajaban en dos embarcaciones neumáticas «en peligro», entre ellos 44 mujeres y 118 menores de edad, explican a Efe fuentes de la organización.
La embarcación ya albergaba a de 119 inmigrantes salvados en una operación el día anterior, el jueves, entre ellos diez mujeres adultas y 59 menores, el más pequeño de cuatro semanas de vida.
La mayoría proceden de Guinea, Mali, Camerún y Costa de Marfil y, a su llegada a bordo, estaban exhaustos y mojados por la travesía. Enseguida se les ofreció ropa seca, agua y comida.
La nave Ocean Viking llevaba unos diez días en el Mediterráneo central tras pasar casi medio año paralizada en Italia por irregularidades que comprometían su seguridad. La organización sospecha que era una forma de detener su labor de rescate.
El buque llegó el 27 de diciembre a Marsella (Francia), donde la tripulación ha hecho una cuarentena de diez días para evitar que hubiera algún caso de coronavirus al inicio de la misión, y soltó amarras el pasado 11 de enero para volver al mar a salvar vidas.
En estos días de misión, el barco ha tenido que volver a puerto, al sardo de Olbia (oeste de Italia), para reparar una avería técnica de pequeña importancia.
Días antes de empezar los rescates en la zona, desde la Ocean Viking trató de salvar a una patera con inmigrantes pero ya había sido intervenida por los denominados guardacostas libios, que la devolvieron a tierra, denuncian las fuentes.
Esto a pesar de que numerosas organizaciones vienen denunciando graves violaciones de los derechos humanos de los inmigrantes en los centros de detención de Libia, un país sumido en el caos y la guerra desde el derrocamiento de Muamar el Gadafi en 2011.