Los Ángeles – Un inmigrante mexicano y su madre que reside en México están siendo buscados por la policía en California en un operativo para desmantelar una extensa red de tráfico sexual que usaba a migrantes indocumentadas y algunas con solicitudes de refugio.
El Departamento del Alguacil del Condado de Ventura (VSD) informó sobre el arresto de al menos siete hispanos, muchos de ellos miembros de una misma familia mexicana, acusados de manejar una red de tráfico sexual en unos seis negocios en el sur de California.
Las autoridades este viernes aún buscan a Carlos Paredes, de 42 años, quien tiene una orden de arresto en su contra, y a su progenitora, María Del Refugio García, de 65 años, que se cree está en México.
La investigación comenzó a comienzos de año después de que las autoridades recibieran información sobre el supuesto tráfico sexual y laboral que ocurría en varios salones de masajes y negocios de cuidado de la piel en los condados de Ventura, Riverside y San Bernardino.
Los negocios supuestamente son propiedad de la familia Paredes y eran operados por ellos mismos.
Los detectives descubrieron que los sospechosos apuntaban principalmente a mujeres de México para trabajar en estos negocios, algunas de las cuales vivían en el sur de California con visas de refugiado, detalló el VSD en un comunicado.
También se presume que los sospechosos utilizaron a traficantes de migrantes para reclutar mujeres en México y traerlas a Estados Unidos para trabajar en estos lugares.
Una vez que las mujeres fueron reclutadas, se colocaron anuncios ofreciendo servicios sexuales en varios sitios de internet que las mostraban,indicaban los precios, el tipo de encuentro sexual y en qué lugar estaban trabajando las mujeres. Estos anuncios se actualizaban a diario y las mujeres se rotaron por los negocios del sur de California propiedad de los sospechosos.
La organización estaba dirigida principalmente por los hermanos Olga y Carlos Paredes. Olga Paredes, de 47 años, quien fue arrestada, presuntamente abrió los negocios con nombres falsos, mientras que su hermano administraba varias de las ubicaciones, recolectaba los pagos, reclutaba a las mujeres y publicaba los anuncios sexuales, explicó el VSD.
Flor De María Evora, que es novia de Carlos Paredes, y Jaime Vásquez, sobrino de Carlos y Olga, administraron la contabilidad y las ganancias de todos los negocios.
A su vez, Olga Ramírez, hija de Olga Paredes, administraba una boutique de moda que supuestamente ayudó a lavar el dinero ilícito y ayudó a su madre a abrir los negocios de tráfico sexual.
La matriarca de la familia, María Del Refugio García, quien vive en México, supuestamente brindó orientación sobre cómo operar los negocios. También abrió cuentas bancarias en México para canalizar las ganancias de estos negocios fuera de Estados Unidos.
Olga Paredes, Flor De María Evora, Olga Ramírez, Jaime Vásquez, Bruce Pineda, Ismael Reyes y Héctor Prado Ramos fueron arrestados bajo cargos de conspiración, trata de personas y proxenetismo, entre otros delitos.
Carlos Paredes y María Del Refugio García se encuentran en búsqueda y captura.