Río de Janeiro – La selección brasileña, que avanzó a las semifinales de la Copa América tras imponerse por un ajustado 1-0 a Chile, dedicó este sábado a la recuperación física, pero ya con la mente enfocada en el partido del próximo lunes ante Perú.
El entrenador Adenor Leonardo Bacchi «Tite» decidió no forzar a sus titulares, que dedicaron la jornada a «trabajos regenerativos», pero dirigió una ligera práctica, que incluyó ejercicios con balón, con los jugadores que no actuaron la noche de este viernes en el partido contra Chile.
La única preocupación de Tite para la semifinal del próximo lunes frente a Perú es definir al sustituto de Gabriel Jesús, delantero del Manchester City que fue expulsado en el partido con Chile tras asestarle una dura patada en el rostro a Eugenio Mena.
Si el entrenador brasileño decide repetir la ofensiva alineación que usó frente a los chilenos, en el ataque contra Perú estarían Neymar, Roberto Firmino y Richarlison, con Gabriel Barbosa «Gabigol» en reemplazo de Gabriel Jesús.
Sin embargo, el lugar del delantero del Manchester City también podría ser ocupado por Lucas Paquetá, autor del gol contra Chile, que suele jugar más retrasado y se desdobla con eficiencia tanto en el ataque como en la marcación en el medio del campo.
El partido del próximo lunes será el segundo que disputen las selecciones de Brasil y Perú en esta edición de la Copa América, ya que se cruzaron en la fase de grupos en un encuentro que acabó con una incontestable goleada por 4-0 de la Canarinha.
El argentino Ricardo Gareca, entrenador de la selección peruana, dijo antes de saber cuál sería su rival en las semifinales que no temía a ningún equipo.
«Todos los partidos son diferentes», indicó Gareca, en aparente alusión a la selección brasileña, ante la cual Perú también perdió la final de la última edición de la Copa América, en 2019. (ag)