Estambul – La muerte de un ciudadano turco por disparos desde el lado griego en el río fronterizo Evros que separa Turquía y Grecia ha causado este domingo tensiones diplomáticas entre los países vecinos, al citar Ankara a la encargada de negocios de la embajada griega, Elena Vakali, para expresar su protesta.
El tiroteo tuvo lugar en la tarde del viernes, cuando dos vecinos del pueblo Adasarhanli en el lado turco de la frontera, a unos 70 kilómetros al sur de la capital provincial de Edirne, se hallaban en la orilla del río Evros, informa la agencia turca Anadolu.
Uno de ellos, Mehmet Durgun, de 43 años, fue alcanzado en la cara por una bala y murió en el acto, señala la citada agencia.
El diario turco Hürriyet asegura que los dos hombres estaban acercándose a un islote del río para recuperar una barca utilizada para el tráfico de migrantes y que tuvieron un altercado con personas vestidas de paisano en el lado griego, antes de ser tiroteados con una pistola.
El Ministerio de Exteriores citó hoy a Vakali para expresar su protesta por el suceso y exigir una investigación del asunto, la captura y el castigo de los responsables y reparaciones para la familia de la víctima, informa Anadolu.
El río Evros, rodeado de bosques y con un cauce dividido por numerosos islotes, es una zona de frecuente paso de refugiados y migrantes que intentan pasar a la Unión Europea, algo que ha provocado reiteradas tensiones entre Ankara y Atenas.
El incidente más grave se produjo a inicios de marzo de 2020, cuando las autoridades turcas facilitaban la llegada de miles de migrantes al río Evros, a veces asistidos por traficantes de la zona.
Las patrullas griegos usaron gas lacrimógeno y balas de goma para repeler los intentos de cruzar y según numerosos testimonios sometían a malos tratos a quienes consiguieron llegar a territorio griego, para luego devolverlos al lado turco.
Las autoridades turcas aseguran que dos refugiados murieron por disparos durante estos incidentes, si bien Atenas ha rechazada toda responsabilidad al respecto.
