Washington – Un legislador republicano del estado de Tennessee ha presentado un proyecto de ley para que se trasladen inmigrantes indocumentados a las ciudades del presidente, Joe Biden, y la vicepresidenta, Kamala Harris.
La idea del trasiego llamó la atención a nivel nacional cuando la lanzó en noviembre pasado el gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien se quejó de que el Gobierno de Biden trasladaba a su estado inmigrantes indocumentados en vuelos secretos.
El representante Bruce Griffey, del distrito Paris en Tennessee, en declaraciones a los medios indicó que la propuesta ya fue un componente clave de su campaña electoral en 2018.
“Quiero que Tennessee se convierta en el último sitio donde los extranjeros ilegales quieran venir”, declaró en marzo del año pasado Griffey, autor de varios proyectos de ley para lidiar con la inmigración en su estado.
Ahora, Griffey concretó la iniciativa con su proyecto de ley para enviar inmigrantes a la ciudad de residencia de Biden, Rehoboth Beach, en Delaware, y al estado natal de la vicepresidenta, en California.
Y añade como posible destino también las ciudades donde tienen su domicilio el jefe de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, de Nueva York, y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, de San Francisco, entre otros.
La lista de ciudades incluye, asimismo, a Block Island y Newport (Rhode Island), Greenwich (Connecticut), Martha’s Vineyard y Nantucket (Massachusetts), Governors Island y Scarsdale (Nueva York), Palo Alto, Yountville y St. Helena (California) y North Hero (Vermont).
El proyecto indica que “el Comisionado de seguridad pública en colaboración con el Comisionado de servicios sociales, desarrollará y pondrá en funcionamiento un sistema para la identificación y reubicación de extranjeros ilegales tan pronto como sea práctico tras su llegada a este estado”.
Según Griffey el Gobierno de Biden “está trasladando a las calladas a miles de (inmigrantes) ilegales a varios estados, incluido Tennessee y deberíamos devolvérselos a quienes nos los remiten”.
“Me imagino que si los reubicamos (a los migrantes) en el patio trasero de quienes son responsables por permitir el flujo de inmigrantes ilegales a través de la frontera, entonces las autoridades federales serán mas aptas para proteger la frontera”, añadió.
Siguiendo la estela de DeSantis, esta semana el Comité Judicial del Senado de Florida aprobó un proyecto de ley que prohibiría al estado hacer negocios con compañías que transportan inmigrantes indocumentados al estado.