Washington – El déficit de Estados Unidos en su comercio exterior de bienes y servicios se disparó un 22,3 % en marzo respecto al mes anterior, hasta ubicarse en los 109.800 millones de dólares, informó este miércoles la Oficina de Análisis Económico (BEA, en inglés).
En el tercer mes del año, las importaciones crecieron un 10,3 % respecto a febrero y se situaron en los 351.500 millones de dólares; mientras que las exportaciones aumentaron un 5,6 %, hasta los 241.700 millones de dólares.
El gran incremento de las importaciones apunta a que el apetito de los consumidores estadounidenses no disminuye pese a la elevada inflación que vive el país, que en ese mismo mes de marzo se situó en el 8,5 %, la más alta desde 1981.
Que el consumo de los estadounidenses -reactivado tras la pandemia- es el motor económico del país ya lo dejaron claro los datos del Producto Interior Bruto publicados la semana pasada.
Aunque el PIB se contrajo un 0,4 % en el primer trimestre fue por culpa de omicron y de la elevada inflación. Pero si la caída no fue mayor fue precisamente gracias al consumo, que supone dos tercios de la actividad económica y creció en el mismo periodo el 2,7 %.
En marzo, el déficit comercial de bienes con China, muy sensible políticamente en EE.UU., subió 7.400 millones de dólares y llegó a un valor de 48.600 millones, fundamentalmente por el gran incremento de las importaciones de ese país, con un aumento de 7.300 millones.
El saldo negativo con la Unión Europea, por su parte, se situó en los 15.600 millones; y con México, en los 10.600 millones.
La subida de déficit en marzo se produce después de que el mes anterior este cayese ligeramente, un 0,1 % respecto a enero, hasta ubicarse en los 89.200 millones de dólares.
Si se suman los tres primeros meses del 2022, el déficit comercial de EE.UU. se situó en 84.800 millones de dólares, un 41,5 % más que en el mismo período del ejercicio anterior, con un aumento de las exportaciones del 17,7 % y de las importaciones del 23,8 %.
Volviendo a la balanza comercial, y en un análisis por sectores, la ventas de material y suministros industriales por parte de Estados Unidos al resto del mundo aumentaron en marzo en 7.400 millones, mientras que las importaciones por este mismo concepto se situaron en 11.300 millones.
Dentro de este segmento se incluyen las compras y ventas de petróleo crudo, que experimentaron a lo largo de marzo una subida de 1.700 millones en exportaciones y de 1.200 millones en importaciones, es decir, que en el primer mes de la guerra de Ucrania, EE.UU. vendió y compró más crudo al resto del mundo que en febrero.
En cuanto al sector automovilístico (vehículos, partes y motores), el país exportó por un valor adicional de 1.000 millones de dólares, y a su vez incrementó la importación de estos bienes por un valor de 3.200 millones de dólares.
En el tercer mes del año, la primera economía del mundo vendió más de lo que compró a Sudamérica y Centroamérica (6.700 millones de dólares de superávit), a Hong Kong (1.300 millones), a Brasil (1.200 millones) y a Reino Unido (500 millones).
Por contra, compró más de lo que vendió, además de a las ya mencionadas China, Unión Europea y México, a Canadá (10.300 millones), a Japón (6.100 millones) y a Taiwán (4.900 millones).