San Salvador – Representantes de las ligas, jugadores y entrenadores pidieron este jueves que se celebre un congreso extraordinario para solicitar a la FIFA la designación de un comité de regularización para buscar soluciones ante la actual situación que vive el fútbol salvadoreño.
La incertidumbre reina en el deporte rey de El Salvador dos semanas después del allanamiento por parte de la Fiscalía en la Federación de Fútbol (Fesfut) como parte de una investigación contra los miembros del Comité Ejecutivo, liderado por su presidente Hugo Carrillo.
Los solicitantes expusieron, a través de una carta divulgada hoy, que el pasado 16 de julio se tenía previsto el desarrollo de un congreso ordinario para la elección de los nuevos miembros del Comité Ejecutivo de la Fesfut, pero dicha reunión no se llevó a acabo.
Lo anterior debido al allanamiento ejecutado por fiscales del Ministerio Público y a que el Tribunal de Disciplina, Ética y Apelaciones del Deporte, adscrito al Instituto Nacional de los Deportes (INDES), abrió un proceso disciplinario contra los dirigentes y emitió una medida cautelar para cesar a los miembros.
El actual Comité Ejecutivo cumple su periodo (2018-2022) el próximo 31 de julio, y de no elegirse a las nuevas autoridades la dirección de la Fesfut quedaría acéfala.
Los representante de las ligas, jugadores y entrenadores explicaron que en el congreso extraordinario -que debe ser convocado por el actual Comité Ejecutivo- se discutiría y aprobaría solicitar a la FIFA «la conformación y autorización de un comité de regularización para un periodo de tiempo temporal» para que, bajo su criterio, «convoque oportunamente a un congreso electoral donde se elija al Comité Ejecutivo de la Fesfut para el periodo 2022-2026».
La atípica situación en el fútbol salvadoreño ha estado marcada por llamados a que el actual Comité Ejecutivo de la Fesfut renuncie y se convoque a una asamblea para elegir a nuevas autoridades, y al paro de las ligas de primera, segunda y tercera división dado que no ha existido autorización a los árbitros para pitar los partidos.
Además del allanamiento a las instalaciones de la Fesfut, el INDES conformó una comisión normalizadora, que tomó posesión de la Federación el pasado 22 de julio. El trabajo de dicha comisión fue «interrumpido» el 23 de julio.
El nombramiento de dicha comisión fue catalogado por diferentes sectores y analistas deportivos como injerencia por parte del Gobierno a través del INDES.
No obstante, el presidente del ente deportivo salvadoreño, Yamil Bukele, negó que existiera.
La FIFA advirtió de la posibilidad de una suspensión y calificó de «injerencia indebida» la creación de dicha comisión por parte del gubernamental INDES y el cese de los directivos.
La FIFA había dado hasta el 25 de julio para el retiro de la comisión, de lo contrario el asunto sería sometido al Bureau del Consejo del máximo rector del fútbol mundial para que tomara una decisión, pero la entidad no ha vuelvo a pronunciar.
La Fiscalía abrió una investigación por supuesta administración fraudulenta y lavado de dinero contra los directivos de la Fesfut, por lo que allanó las instalaciones de la entidad.