Tegucigalpa – En Honduras, cada seis horas un menor de edad es abusado sexualmente y el 84 % de casos quedan impunes, además, entre el 85 % a 90 % de los casos ocurren en el entorno cercano a la víctima, de acuerdo al informe de la Asociación para un Sociedad más Justa (ASJ).
El organismo de la sociedad civil reflexionó este viernes sobre el tema y en un informe detalló que tres violadores seriales que operaban en la capital de Honduras fueron arrestados gracias al trabajo conjunto de la Fiscalía Especial de la Niñez, Agencia Técnica de Investigación Criminal (ATIC), la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y el acompañamiento de la Asociación para un Sociedad más Justa (ASJ).
Los niños y niñas están en constante riesgo de sufrir abuso sexual de quienes menos lo esperan, tal y como ocurrió a 13 menores que cayeron en las garras de dichos violadores seriales, indicó ASJ.
Uno de los casos es el de un maestro de educación primaria, quien aprovechó su puesto de trabajo y la confianza de los padres de familia para abusar sexualmente de cuatro niñas de entre 4 y 8 años de edad. El hombre de 41 años de edad, residía en la colonia La Haya en Comayagüela y sus víctimas eran sus alumnas, de quienes abusó entre 2017 y 2019, de acuerdo al expediente del Ministerio Público fue dejado en libertad por estos casos, pero en junio de 2022 fue arrestado por otro delito de abuso sexual infantil y actualmente se encuentra esperando fecha para juicio oral y público.
El otro, es un hombre de 36 años de edad que trabajaba lavando automóviles y quien abusó sexualmente de cuatro menores de bajos recursos económicos que trabajaban limpiando vidrios y carros en los bulevares Morazán y Próceres de Tegucigalpa. El individuo, es un hombre casado, quien residía en la colonia Las Minitas y los abusos los cometió contra cuatro niños varones a quienes los intimidaba valiéndose de amenazas, y a otros les ofreció dinero y juguetes para que confiaran en él. Todos los abusos los cometió en el año 2021, en plena pandemia, pero este violador serial espera condena solo por tres casos.
El tercer caso se trata de un violador serial identificado como Alcides Antonio Martínez Moncada de 40 años de edad, que fue beneficiado con preliberación durante la pandemia y aprovechó la libertad para cometer más violaciones. Este individuo abusó de dos hermanitas de 8 y 11 años de edad y también tenía dos denuncias por abuso sexual en perjuicio de tres víctimas comprendidas entre las edades de tres, cinco y catorce años de edad (dos niñas, un niño).
El 31 de mayo del presente año 2022, el imputado fue condenado a treinta y cinco años de reclusión mediante estricta conformidad en el Tribunal de Sentencia, por los delitos de violación agravada, otras agresiones agravadas y privación injusta de la libertad.
En Honduras, cada seis horas un menor de edad es abusado sexualmente y el 84 % de casos quedan impunes, además, entre el 85 % a 90 % de los casos ocurren en el entorno cercano a la víctima, de acuerdo al informe de la ASJ presentado este año, donde se revela que entre 2016 y 2020, la tasa de abuso sexual infantil aumentó 25 % cada año.
El informe titulado Índice de Impunidad y Respuesta Institucional ante el Abuso Sexual Infantil, detalla que los cinco departamentos con la mayor cantidad de denuncias son: Francisco Morazán (2,038), Cortés (1,151), Atlántida (836), Comayagua (807) y El Paraíso (787).
¿Cuál es el acompañamiento que brinda la ASJ en casos de abuso sexual infantil?
El programa Rescate de la ASJ lleva más de una década apoyando psicológicamente a niñas y niños víctimas de crímenes sexuales y sus familiares, trabajando el proceso terapéutico enfocado en la superación del trauma, con el objetivo de ayudar a entender, integrar y resolver aquellas experiencias que afectan a su desarrollo, a sus pautas de interacción con el entorno y a su seguridad.
Bajo su visión como cristianos valientes, la ASJ, a través de su programa Rescate, trabaja al lado de las autoridades encargadas de hacer justicia en casos de abuso sexual infantil y proporciona acompañamiento a las víctimas y a sus familiares para que sigan con el proceso: investigativo, legal y psicológico.
La atención psicológica brindada a las víctimas con grupos de auto-apoyo les ayuda a fortalecer y superar sus experiencias traumáticas y que, a su vez, puedan continuar con sus metas establecidas y proyectos de vida.
Es importante mencionar que la terapia grupal facilita a la víctima compartir su experiencia con otras víctimas, aprendiendo y descubriendo nuevas formas de superar obstáculos y limitaciones y así poder hacer frente a su historia de abuso sexual.