Tapachula (México) – En la frontera sur de México, límite con Guatemala, migrantes pertenecientes al colectivo LGBT y activistas realizaron su segunda intervención artística: el pintado de los “Senderos peatonales” en Tapachula para promover la inclusión, el respeto, la tolerancia, la empatía y terminar con la discriminación y xenofobia.
Rafael Alegría López, director de la organización Ciudad Arcoíris, un paso por la diversidad, y de casa Cultura Do Brasil, estableció que esta es una iniciativa ciudadana que nace a través de la suma de voluntades de diferentes colectivos, ciudadanos y autoridades municipales.
“En Tapachula, este año han pintado dos senderos peatonales, los cuales buscan promover espacios incluyentes en la ciudad, donde todas las personas se sientan seguras, incluidas y sobre puedan todo celebrar la diversidad no solo en este mes, sino en todo el año para que nadie sea discriminado en ningún espacio o ningún tipo”, dijo.
Apoyaron esta actividad personas en movilidad de Centroamérica, el Caribe y mexicanos que han estado buscando la inclusión en la ciudad, no solamente por cuestiones de orientación, expresión e identidad de género, sino también por el derecho de expresarse.
A esta actividad se unieron migrantes haitianas, quienes tomaron brochas, rodillo y pintura para ser parte de este grupo de migrantes que busca ser parte de la sociedad mexicana sin discriminación.
Desde abril del año pasado llegó a Tapachula Telus Naemo, una haitiana que viene acompañada de tres compatriotas. Ella dijo que participar en esta actividad es vivir sin miedo, con amor, libertad y sin discriminación.
“Eso significa muchas cosas, amor libre, tu puedes vivir sin miedo con tus sentimientos para que tu no tengas problemas con tu relación sexual con la libertad”, relató.
Otra compatriota, es Marie Lucie, quien vive en Tapachula, y denunció que fue golpeada y discriminada, por lo que pidió mayor libertad para hacer su vida.
“Nos dicen palabras malas, como lesbianas feas. Lesbianas no pueden vivir. En mi país matan lesbianas y gays, pero en otros países que ingresan tienen que respetar, justicia para ellos, me siento muy feliz de participar en Casa Frida”, relató ella.
Hannie Chinchia, colaboradora de la ONG Casa Frida, dijo que esta actividad se piensa solo como un paso peatonal, pero es mucho más, un paso por la diversidad y que se vea que las personas LGBTTI son de la comunidad migrante y así evitar más racismo en Tapachula.
“Lo hacemos por todas las personas que han sido victimas de feminicidio, personas trans, por las personas que han sido discriminadas y ofendidas incluyendo a quienes han pasado por un proceso migratorio, migrando por personas de la diversidad sexual por lo que protestamos de esta manera pacífica”
Luisa Penetra, miembro del grupo de LGBTTI y originaria de Cacahoatán pero con residencia en Tapachula, aseguró que están dejando mucha huella y tienen mayor visibilidad.
Penetra remarcó que no son personas malas, ni buscan problemas, sino que su objetivo es ser libres, ya que se enfrentan a la homofobia y xenofobia.
“Ahorita en Tapachula, como se ve ya no, mucha gente le está gustando esto de la diversidad y está participando, como te digo estamos marcando donde existe la diversidad”, agregó.
De acuerdo a los activistas de la frontera sur de México, existen alrededor de unas 200.00 personas mexicanas y migrantes pertenecientes a los grupos LGBT.