Washington – Un juez federal en Texas (EEUU) rechazó este miércoles un recurso del Gobierno del presidente, Joe Biden, y declaró nuevamente ilegal el programa Acción Diferida para los llegados en la Infancia (DACA).

El juez Andrew Hanen, del distrito sur de Texas, desestimó hoy el intento de la Administración demócrata de registrar el plan en la ley federal con la esperanza de protegerlo ante las demandas en su contra y de favorecer así a los más de medio millón de beneficiarios del amparo migratorio.

El fallo, que tiene altas probabilidades de ser apelado nuevamente por el Ejecutivo de Biden, no ordena que se tomen acciones contra las personas que se benefician del DACA actualmente, como deportarlas o invalidar sus permisos de trabajo.

Hanen, quien en 2021 declaró ilegal el memorando inicial que creó el programa DACA, argumentó en el documento que aunque siente «simpatía» por los soñadores, como se les conoce a los beneficiarios de DACA, tiene «problemas con la legalidad del programa».

«La solución» para estar personas «recae en la rama legislativa y no en la ejecutiva o la judicial», subrayó el magistrado en el escrito.

«El memorando inicial fue promulgado de manera ilegal» y según el juez el gobierno de Biden intentó simplemente «formalizar» un programa que el magistrado ya declaró como irregular.

«No hay ninguna diferencia material» entre el documento que creó el programa DACA en 2012, bajo el gobierno del expresidente demócrata Barack Obama (2009- 2017), y el que fue presentado por la actual administración el año pasado, subrayó Hanen.

Esta batalla judicial, que parte de una demanda presentada por 8 estados con gobiernos republicanos, se ha alargado durante años y es probable ahora que llegue a la Corte Suprema.

DACA ha permitido a más de medio millón de migrantes que llegaron a EEUU cuando eran menores de edad permanecer en EEUU sin miedo a ser deportados y trabajar legalmente.

Grupos activistas han pedido al Congreso tomar acciones para dar una solución permanente a los «soñadores», asegurando que es cuestión de tiempo antes de que los tribunales decidan acabar definitivamente con el programa.

DACA fue puesto en marcha por el Gobierno de Obama como una medida temporal, pero su sucesor en la Casa Blanca, el republicano Donald Trump (2017-2021), decidió en el primer año de su mandato ponerle fin, lo que desencadenó un efecto dominó de demandas y contrademandas en cortes que llevaron a la situación actual.