Bruselas – Los líderes de la Unión Europea (UE) apoyaron este viernes el objetivo de trabajar en la dimensión exterior de la migración, a través de nuevos acuerdos para cooperar con los países de origen y tránsito, empezando con Egipto, y la idea de trabajar en un sistema común para los retornos de los migrantes irregulares.
El asunto fue tratado en una cumbre europea donde los líderes mantuvieron una «discusión estratégica» sobre la migración y «tomaron nota» de la carta que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, les envió con vistas a la reunión.
En esa misiva, la máxima responsable del Ejecutivo comunitario hablaba de buscar nuevos acuerdos para prevenir las salidas de irregulares, similares al memorando de entendimiento firmado el pasado verano con Túnez, y mencionaba como prioridad tratar de sellar un acuerdo con Egipto.
Asimismo, hablaba de trabajar en un sistema común para los retornos de los migrantes irregulares y mencionaba elementos concretos para avanzar en ese objetivo.
«Hubo un fuerte apoyo a la carta», dijo al término del Consejo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en rueda de prensa.
Explicó que la UE está «progresando» tanto en la negociación del pacto europeo de migración y asilo como en las medidas operativas para abordar la situación en las diferentes rutas migratorias.
Evitar las salidas es la prioridad, dijo Von der Leyen, y apuntó a «incrementar las capacidades de los países vecinos para la vigilancia de fronteras» y las operaciones de búsqueda y rescate.
«Necesitamos construir acuerdos de asociación mucho más completos y mutuamente beneficiosos (…) por ejemplo, con Egipto», y adoptar «medidas enérgicas contra los contrabandistas y traficantes», añadió.
En un encuentro con medios, incluida EFE, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, se refirió al futuro acuerdo con Egipto y dijo que será necesario asegurar que «todos» los Estados miembros de la UE estén «estrechamente implicados en la preparación de este pacto y el proceso de toma de decisiones» sobre el convenio.
El objetivo es garantizar que los Veintisiete estén «unidos y todos cómodos» con el resultado de las negociaciones sobre el pacto con El Cairo, según Michel.
Otra prioridad para Bruselas es aumentar las devoluciones de inmigrantes irregulares, que hoy están en el 22 %, un porcentaje que Bruselas considera bajo.
Según explicó Von der Leyen en su carta, a finales de julio de este año se habían adoptado en la UE 290.000 decisiones de retorno y solo habían tenido lugar 64.000 retornos efectivos.
«Ese número tiene que aumentar», subrayó hoy Von der Leyen.
En ese contexto, detalló algunos de los elementos de la idea de trabajar en un sistema común de retornos.
«Ofrecemos a los Estados miembros una cooperación mucho más estrecha (…) para acelerar los procedimientos y garantizar el reconocimiento mutuo de las decisiones de retorno», indicó.
Para abordar las devoluciones, la máxima responsable de la Comisión mencionaba medidas concretas, como la disposición de Bruselas a trabajar «en equipos con los Estados miembros en acciones de retorno específicas, con un Estado miembro o una agencia líder para cada acción».
Añadía que, a tal fin, Bruselas desarrollará «una hoja de ruta» que podría centrarse en «garantizar» que las decisiones de retorno se emitan al mismo tiempo que las negativas a conceder el asilo.
También se podría «garantizar sistemáticamente el reconocimiento mutuo de las decisiones de retorno y las medidas de cumplimiento de seguimiento».
Las conclusiones de los líderes mencionaron también los recientes ataques terroristas en Francia y Bélgica, el último cometido por un migrante irregular de Túnez.
En ese contexto, piden realizar «esfuerzos concertados para movilizar todos los ámbitos políticos pertinentes a nivel nacional y de la UE para mejorar la seguridad interior».
Con ese objetivo, hablan de aumentar la cooperación judicial y el intercambio de información a través de las bases de datos pertinentes.