Refugiados y activistas protestan durante una visita del presidente Barack Obama, el jueves 11 de febrero de 2016, en Los Ángeles, California (EE.UU.). Los manifestantes denunciaron que desde mediados de 2014, la administración de Obama ha perseguido a refugiados centroamericanos que buscan asilo en Estados Unidos. EFE/Archivo

Los Ángeles – Al menos tres refugios que atendían a desamparados en un condado del sur de California se convirtieron en una pesadilla para sus ocupantes, quienes afrontaron condiciones insalubres y reportaron casos de abusos sexuales y físicos.

Así lo denuncia un reporte de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) difundido este jueves y en el que, al cabo de un año de investigación en el que se realizaron visitas y entrevistas a más de 70 personas, revela situaciones de abuso y negligencia en refugios de emergencia del Condado de Orange.

El documento da cuenta de malas condiciones de las instalaciones, donde los baños no sirven y tienen problemas con las aguas residuales, además de que no existe calefacción durante la temporada de frío y se han registrado inundaciones en la época de lluvias.

El estudio encontró que los residentes viven en medio de una infestación de roedores, gusanos y otros insectos, y que hay una continua escasez de jabón y productos de limpieza.

ACLU destacó en su reporte que los desamparados entrevistados denunciaron ser discriminados por edad, raza, género y por tener problemas de discapacidad.

También hubo denuncias de abuso sexual, dado que se les exigió a algunas mujeres favores sexuales a cambio de servicios. Los investigadores descubrieron que hubo abuso físico, incluso a ancianos y discapacitados que terminaron en la sala de emergencias.

Entre las violaciones más preocupantes figuran también la privación de derechos fundamentales, como el de expresión o libre movimiento, dado que los residentes eran amenazados con ser echados del lugar o no se les permitía salir, según denunciaron. Los empleados de los refugios además confiscaron, destruyeron o robaron pertenencias de los desamparados.

El reporte llega en medio de una expansión del sistema de refugios de emergencia, mediante el cual se pretende retirar a los indigentes de lugares turísticos como la ciudad de Anaheim, donde se ubican los parques de Disneylandia.

«Los refugios de emergencia del Condado de Orange están peligrosamente no regulados y son abusivos», dijo en un comunicado Eve Garrow, analista de la filial del sur de California de ACLU.

«La necesidad de una reforma se vuelve cada vez más urgente a medida que se agregan más refugios al sistema», añadió.

El informe, que fue presentado al Procurador General de California, al Departamento de Vivienda y Desarrollo Comunitario, y al Departamento de Empleo y Vivienda Justos, solicita una investigación privada.

«Las personas no renuncian a sus derechos constitucionales solo porque no tienen hogar», dijo Julia Devanthéry, abogada de ACLU.

El informe incluye diez recomendaciones para que se apliquen tanto a los refugios establecidos y a los proyectos que abrirán sus puertas en los próximos meses.