Los Ángeles – Los arrestos de migrantes que cruzan la frontera sur de EEUU de forma irregular han disminuido más del 50 %, desde que el pasado 4 de junio el presidente, Joe Biden, proclamase una medida ejecutiva que restringe de manera drástica las solicitudes de asilo en la frontera con México.
En agosto pasado se arrestaron entre los puertos de entrada de la frontera suroeste alrededor de 58,000 migrantes, lo que representa un 68 % menos de detenciones con respecto a agosto de 2023, subrayó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) en un comunicado este lunes.
La cifra de detenciones de agosto de 2024 representa el número más bajo de detenciones anuales a lo largo de la frontera suroeste desde el año fiscal 2020, y más bajo que el promedio mensual del año fiscal 2019.
La orden ejecutiva también ha impulsado «un aumento significativo en el número de migrantes expulsados y devueltos a sus países de origen y una disminución en el número de personas liberadas (en Estados Unidos) en espera de sus procedimientos de expulsión», destacó CBP.
Desde la implementación de la medida y hasta el 10 de septiembre pasado, el Departamento de Seguridad Interna (DHS, en inglés) ha expulsado del país a más de 131,000 migrantes a más de 140 países, lo que incluye más de 400 vuelos de repatriación.
Estas expulsiones durante el último año superan las realizadas en cualquier año fiscal desde 2010.
En la frontera norte también se ha registrado una caída del 30 % de las detenciones de migrantes que cruzan de forma irregular entre el periodo de junio a agosto.
La orden de Biden ha permitido a las autoridades estadounidenses deportar a quienes no superen unos estrictos estándares de asilo cuando se supera la cifra de 2.500 detenciones diarias en la frontera durante un promedio de siete días.
Angelo Fernández Hernández, portavoz de la Casa Blanca, destacó los avances logrados por la medida implantada por la Administración demócrata y cargó contra los republicanos en el Congreso de EEUU que bloquearon el avance de una propuesta bipartidista que contenía medidas de control en la frontera.
“(Los republicanos) están más interesados en jugar cínicamente a la política que en asegurar la frontera. La administración Biden-Harris ha tomado medidas efectivas y los funcionarios republicanos siguen sin hacer nada”, señaló el vocero.