Cracovia (Polonia).– El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ratificó este sábado desde Polonia su apoyo a ese país, la principal vía de escape para refugiados que huyen de la guerra en Ucrania, mientras abordaba con su Gobierno un incremento de la aportación a la seguridad polaca.

Blinken, la más alta personalidad diplomática norteamericana de la administración Biden que ha visitado Polonia, se reunió en la ciudad de Rzeszów (sur) con el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, donde ambos se mostraron de acuerdo con reforzar el flanco Este de la OTAN.

El secretario de Estado anunció la decisión de Washington de donar 2.750 millones de dólares en suministros humanitarios para los refugiados en Ucrania y Polonia, país del que alabó «su liderazgo y rapidez en responder a la crisis humanitaria» desencadenada tras la «invasión de Ucrania».

La administración del presidente Joe Biden ha solicitado al Congreso la aprobación de esa partida, afirmó Blinke, quien calificó a Polonia de país «líder» en esta crisis, tanto por el apoyo a los refugiados como en materia defensiva.

Los ministros polacos de Defensa, Mariusz Blaszczak, y de Exteriores, Zbigniew Rau, visitaron uno de los puntos de acogida y asistencia a los refugiados que llegan a Polonia desde Ucrania y cuyo número rebasa los 780.000, más de 106.000 de ellos llegados en las últimas 24 horas.

Se estima que salieron de Ucrania en los últimos diez días 1,2 millones de personas, de los cuales 78.000 serían no ucranianos, principalmente estudiantes o trabajadores residentes en ese país y pertenecientes a 138 nacionalidades, según cifras de la ONU hechas públicas el viernes.

«Los polacos saben lo importante que es defender la libertad, al igual que los estadounidenses, por lo que nos mantendremos unidos en el apoyo a Ucrania contra una invasión deliberada, ilegal y no provocada», declaró Blinken a la prensa, en una comparecencia con Rau.

En otra declaración, por separado, Morawiecki confirmó que los temas de conversación fueron la guerra en Ucrania, el envío de más fuerzas militares de EE.UU. a Polonia y la imposición de sanciones contra Rusia.

«Tenemos más de 10.000 soldados estadounidenses en Polonia y nos esforzaremos por acoger a tantos como sea posible, así como equipos militares para defender nuestro espacio aéreo», afirmó el jefe del Ejecutivo polaco.

En Polonia se instalaron 5.000 paracaidistas de la 82 División estadounidense, a los que se unirá un grupo de personal administrativo compuesto por 300 personas en pocos días, además de ocho cazabombarderos F-35 y un número indeterminado de helicópteros de combate AH-64 Apache.

En total, Estados Unidos ha desplegado ya 12.000 tropas en Europa oriental, el mayor contingente movilizado desde la «Guerra Fría».

La sintonía con el secretario de Estado Blinken fue «muy buena», y reafirmó la necesidad de que «todos los aliados (occidentales) hablen en la misma onda, sobre todo hoy, cuando la seguridad es una prioridad absoluta y se necesita crear una estructura aún más sólida en la parte oriental de la Unión Europea», según Morawiecki.

En varias ocasiones, el dirigente polaco se refirió a las «sanciones aplastantes» contra los bancos y empresas rusos pues, «aunque la OTAN no está en guerra con Rusia, pero es de este modo como podemos ayudar a poner fin a la guerra y mantener la soberanía de Ucrania».

Tras enfatizar que en su opinión «hay que aislar al Kremlin» del comercio de gas con Europa, Morawiecki recordó que Polonia está «completando la construcción del gasoducto del Báltico a Noruega» y «obteniendo más petróleo de Arabia Saudita» para asegurarse «fuentes alternativas de suministro» energético.

El ministro polaco de Exteriores, por su parte, anunció que Polonia creará «un centro de documentación de crímenes de guerra en Ucrania» y que a este respecto «cuenta con la cooperación de los EE. UU.».

«Sobre la base de sus dolorosas experiencias en el pasado, Polonia exigirá incesantemente el enjuiciamiento de los criminales de guerra. Es una cuestión de memoria compartida», dijo Rau.

El jefe de la diplomacia polaca agregó que su país, que ejerce la presidencia de turno de la OSCE, solicitó la creación de corredores humanitarios para evacuar a los civiles de las ciudades ucranianas sitiadas.

«La agresión de Rusia contra Ucrania ha provocado una crisis humanitaria de una escala inimaginable», concluyó.

Mariusz Blaszczak informó en sus redes sociales de que los 250 tanques de fabricación estadounidense M1 Abrams que Polonia compró en octubre de 2021 «serán entregados lo antes posible».