El Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad de la UE, Josep Borrell. EFE/EPA/NABIL MOUNZER

Barcelona (España) – El Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea (UE), el español Josep Borrell, defendió este sábado que la experiencia común de España e Italia sobre el problema migratorio sea la base para acordar una política común en relación con este asunto.

Borrell, que se encuentra en el Líbano, planteó la propuesta en su intervención mediante un vídeo grabado en el 18º Foro de Diálogo España-Italia, que se celebra en Barcelona (noreste español).

Insistió en la situación del Mediterráneo para lamentar que la esperanza de convergencia entre sus dos riberas no se haya materializado, la distancia económica haya crecido y a ella se haya sumado la brecha demográfica.

Esto, asumió, va a impulsar corrientes migratorias a las que hay que hacer frente tanto económica como socialmente.

Borrell señaló que España e Italia tienen intereses comunes en el Mediterráneo y para afrontar esos retos parten de una posición común y son dos países pioneros en la gestión de la inmigración y muchas veces en circunstancias difíciles.

Explicó que ambos han llegado a acuerdos con vecinos del Mediterráneo y por ello recalcó que su experiencia común debería servir de base a una política europea de migración.

«Una política que nos hace mucha falta y que durante muchos años hemos sido incapaces de construir», constató antes de insistir en la necesidad de acordarla tanto por razones humanitarias como por el propio interés de la UE.

Europa, indicó, necesita inmigrantes para cubrir su bache demográfico, mantener el estado del bienestar y lograr el desarrollo económico de todo el Mediterráneo para asegurar la estabilidad geopolítica de la región.

Ante ello, consideró que España e Italia pueden tener un papel de liderazgo que impulse los objetivos de la Unión por el Mediterráneo.

Por su parte, el presidente del Parlamento Europeo, el italiano David Sassoli, dijo que es el momento de «intervenir con pragmatismo» en materia de migración y abogó por una «gran iniciativa europea» para «salvar» el Mediterráneo.

«Se acabó morir en el Mediterráneo (…) Es el momento de reflexionar», señaló en alusión a los inmigrantes que fallecen en el mar cuando tratan de alcanzar Europa desde África.

Sassoli planeó corredores humanitarios que permitan «una distribución equilibrada» que tenga en cuenta «las necesidades de los mercados laborales de los Estados miembros».