Sao Paulo – Los cerca de 150 inmigrantes afganos acampados hace varias semanas en el aeropuerto internacional de la ciudad brasileña de Sao Paulo comenzaron a ser trasladados a un centro de acogida en otra ciudad este viernes, más de una semana después de detectarse un brote de sarna, confirmaron a EFE militantes de ONG sobre el terreno.
El Ministerio de Justicia informó que el grupo, formado por personas que huyeron del régimen talibán con visados humanitarios, será transferido a las dependencias del Sindicato de Químicos de Praia Grande, en el litoral del estado de Sao Paulo, con la ayuda de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y otras ONG.
El secretario nacional de Justicia, Augusto de Arruda Botelho, presentó la medida como «una acción de emergencia para reacomodar a los inmigrantes que hoy viven en una situación delicada y precaria», y aseguró que «nuevos centros de acogida» están siendo preparados para futuras llegadas.
La decisión llega en medio de denuncias de la sociedad civil por la pasividad de las autoridades ante una potencial crisis de salud pública en el principal aeropuerto del país, agravada la semana pasada por varios casos de sarna, una enfermedad altamente contagiosa que provoca picores.
El coordinador del Colectivo Frente Afgano, Miguel Freire Couy, señaló a EFE que los traslados son realizados con la ayuda apenas de un mediador cultural, pero que los inmigrantes están contentos de que termine «la pesadilla» en la que muchos de ellos viven desde hace 20 días.
Asimismo, Freire Couy afirmó que esta situación «puede volver a repetirse» porque el Gobierno solo actuó después de que el estallido del brote de sarna creara un revuelo mediático y social.