Tapachula (México) – La caravana migrante, integrada por unos 4,000 migrantes de varios países y que se ha estacionado en el municipio mexicano de Huixtla, estado de Chiapas, se enfrentó este miércoles con agentes de la Guardia Nacional e ingresó por la fuerza a las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM) en el lugar.
La irrupción se dio luego de que los migrantes cumplieron dos días a las afueras del Centro de Atención Integral al Tránsito Fronterizo (Caitf) de Huixtla, a unos 40 kilómetros de la ciudad de Tapachula, donde buscan obtener documentos de tránsito que les permitan continuar su travesía hacia la frontera con Estados Unidos.
Inconformes e impacientes porque las autoridades no han dado respuesta a sus peticiones de permisos temporales, los migrantes se organizaron y entraron de forma violenta a las oficinas alrededor de las 12:00 hora local (17:00 GMT).
En el enfrentamiento, los extranjeros chocaron con un grupo de agentes que intentó detenerlos con equipo antimotines, pero los migrantes se fueron a los golpes a cuerpo limpio y mediante pedradas rompieron cristales del edificio.
En la revuelta, los migrantes, que llevan días esperando sus permisos temporales, lograron entrar a la oficina del Caitf y ya adentro lanzaron piedras, vallas metálicas, sillas y objetos a las oficinas y a los agentes de la Guardia Nacional que intentaron contenerlos.
El venezolano José Antonio Gutiérrez dijo a Efe que pidió a las autoridades federales que «agilicen la entrega de documento para poder movilizarse a la frontera norte de México».
Durante su protesta, los migrantes, que resultaron con tres heridos, gritaban «¡Queremos permisos, queremos permisos, permisos, permisos!».
Dany Maldonado, también de Venezuela y quien viaja solo, contó que ya había obtenido un permiso temporal en la estación migratoria Siglo XXI en Tapachula pero que unos agentes «lo rompieron en el norte del país» y por ello tuvo que regresar a Tapachula.
«Llegué a Tapachula y me vine en la caravana, caminé a la aduana de migración donde nos han dicho que debemos regresar a la oficina de Tapachula», contó a Efe.
Por la mañana, las autoridades del INM ingresaron a grupos de 50 personas que tenían cita y a unos 100 personas de la caravana para revisar su estatus migratorio parar definir su situación legal en el país.
Los migrantes indicaron a medios que no se van a mover de las afueras de la oficina migración hasta que les otorguen sus permisos, además, por segundo día consecutivo bloquearon la carretera costera que comunica a los municipios de Chiapas, fronterizos con Guatemala, provocando una larga fila de vehículos.
La caravana refleja el flujo migratorio récord a Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, en inglés) ha interceptado a más de 1.6 millones de personas en lo que va del año fiscal 2022, que inició en octubre pasado.
Además, México recibió un récord de más de 58,000 solicitudes de refugio en la primera mitad de 2022, un incremento anual de casi 15 %, según la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).