Tegucigalpa – A 21 días de las elecciones generales en Honduras, el cardenal Óscar Andrés Rodríguez externó este domingo su preocupación por la indiferencia de la población y sentenció que no salir a votar es pecado.
– “No hay voto que valga una gota de sangre”, reflexionó el religioso ante los rumores de violencia en el día de las elecciones en Honduras.
“Nos preocupa en primer lugar que hay indiferencia, no salir a votar es pecado de omisión”, reflexionó el líder de la Iglesia Católica de Honduras durante la homilía dominical.
En la celebración eucarística que tuvo lugar en la Basílica Menor Nuestra Señora de Suyapa en Tegucigalpa el cardenal hondureño explicó que en la democracia la única manera de alcanzar los cambios es con la participación de todos.
“Una persona indiferente es cómplice que no se lleven a cabo los cambios en democracia”, agregó.
De igual manera expresó preocupación por la confrontación de parte de los sectores políticos del país.
Señaló que la confrontación no es el camino a la democracia y por ende nadie debe ser cómplice de ninguna confrontación.
Lamentó que se esté infundiendo el miedo en la sociedad hondureña y criticó a quienes venden la idea de que habrá violencia en las elecciones y lo mejor es no salir a ejercer el sufragio.
Con base en lo anterior, el también el coordinador del Consejo de Cardenales del Vaticano, realizó un enérgico llamado para salir a votar el domingo 28 de noviembre
Honduras elegirá el último domingo de noviembre un presidente, tres designados (vicepresidentes), 298 alcaldías municipales, 128 diputados al Parlamento local y 20 al Centroamericano.
Hay quienes quieren infundir miedo para hacer sus trampas, acentuó el religioso al tiempo que reiteró no ser cómplice.
Al respecto pidió disuadir a todos estos sectores que infunden miedo y que han llegado a expresar que han entrado armas al país para generar violencia.
“No hay voto que valga una gota de sangre de ningún hermana y hermano hondureño, no tienen por qué haber violencia, muerte y confrontación, eso no es un estado democrático”, caviló.
Resumió que más fuerte es el bien que el mal y pidió orar por aquellos que sienten la tentación de la violencia para que comprendan que están actuando contra Dios quien nos dio la vida y quiere que se respete la vida.
A continuación Proceso Digital reproduce la lectura del día tomada del santo evangelio según san Marcos (12,38-44):
En aquel tiempo, entre lo que enseñaba Jesús a la gente, dijo: «¡Cuidado con los escribas! Les encanta pasearse con amplio ropaje y que les hagan reverencias en la plaza, buscan los asientos de honor en las sinagogas y los primeros puestos en los banquetes; y devoran los bienes de las viudas, con pretexto de largos rezos. Éstos recibirán una sentencia más rigurosa.»
Estando Jesús sentado enfrente del arca de las ofrendas, observaba a la gente que iba echando dinero: muchos ricos echaban en cantidad; se acercó una viuda pobre y echó dos reales.
Llamando a sus discípulos, les dijo: «Os aseguro que esa pobre viuda ha echado en el arca de las ofrendas más que nadie. Porque los demás han echado de lo que les sobra, pero ésta, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir.»
