Roma – Entre 670 y 700 migrantes han llegado en las últimas 24 horas a la isla de Lampedusa, según los guardacostas italianos, que han atendido a unas 17 embarcaciones en apuros, pero las organizaciones humanitarias indican que hay muchas más navegando en el Mediterráneo.

En el centro de acogida de Lampedusa permanecen en la actualidad más de 1,400 migrantes, según medios locales, cuando solo tiene capacidad para 400 personas.

El buen tiempo ha animado a muchas embarcaciones, la mayoría procedentes de Túnez, a emprender la ruta que conecta el norte de África con las costas de Lampedusa y Sicilia, en el Mediterráneo central, aunque no se ha repetido la avalancha del pasado marzo, cuando más de 4,000 migrantes llegaron a estas cosas en un único fin de semana.

De acuerdo con la ONG Sea Watch, que pilota un avión para sobrevolar las aguas, en la actualidad hay al menos otras 19 embarcaciones con problemas.

«Este año, la Semana Santa no volverá a ser tranquila en el Mediterráneo. Solo ayer encontramos 19 embarcaciones en peligro con nuestros aviones de reconocimiento en el Mediterráneo, muchas de las cuales probablemente siguen ahí», indicó en sus redes sociales.

Por su parte, Alarm Phone, una red de activistas que reciben las llamadas de las barcazas, advirtió de que un pesquero con 400 migrantes navega a la deriva cerca de las costas de Malta tras ser ignorada por un buque comercial cercano que no prestó ayuda y prosiguió su ruta.

Además, la ONG alemana Reqship afirmó en sus redes sociales que tras rescatar a una veintena de personas, cuya barca naufragó por la noche, los supervivientes contaron que al menos otras 20 personas fallecieron en el mar, aunque esa información no ha sido confirmada por autoridades.

Las llegadas a Italia ascendieron a 28,000 en los tres primeros meses de 2023, un 300 % más que las 6,800 de 2022, y a este ritmo, las proyecciones apuntan a 430,000 desembarcos a finales de año, por lo que el Gobierno italiano pretende acelerar las iniciativas para frenar las salidas especialmente desde Túnez y Libia.