Houston (TX) – Una mujer cubana de 23 años y que dio a luz a un varón en un hospital en el sur de Texas se halla bajo custodia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) desde hace cinco días, es decir más de las 72 horas que estipula la normativa federal.
Así lo confirmó a Efe este jueves Amy Cohen, directora ejecutiva y fundadora de Every Last One, una organización a favor de los inmigrantes y que mantuvo contacto con la indocumentada el sábado, día en que fue puesta bajo custodia de las autoridades federales de Inmigración y cuando habían pasado 24 horas desde que dio a luz.
«Nos dijo CPB que la dejaría en libertad anoche pero hasta esta tarde sigue recluida, y desconocemos y nos preocupa de forma alarmante cuál es su condición y la de su bebé», señaló Cohen.
La directiva de la organización dijo que el centro de detención de El Río (Texas), donde se encuentra retenida la mujer, no ofrece cuidado postnatal ni las condiciones de sanidad necesarias para ella y el recién nacido.
Cohen señaló que la indocumentada pudo comunicarse también con su madre y su tía minutos antes de ser detenida y de que le quitaran el teléfono.
«El único delito que tiene en su haber es considerado un delito menor al arriesgar su vida y cruzar la frontera en estado de gestación para buscar un futuro mejor para ella y para su hijo que, por derecho, es ciudadano estadounidense», agregó.
Cohen denunció que esta no es la primera vez que los agentes de la Patrulla Fronteriza actúan así con una madre gestante.
«Forzar a una madre a dormir en un piso frío en una celda donde las luces están prendidas las 24 horas representa un acto muy cercano a la tortura», señaló.
De acuerdo a medios locales, CBP se ha mantenido en contacto con los familiares de la cubana y les ha informado que la madre y el bebé se encuentran en buen estado de salud.
En varias oportunidades, las autoridades migratorias han reprendido la táctica empleada por los traficantes de personas que cruzan la frontera al utilizar mujeres embarazadas como anzuelo con la finalidad de sensibilizar la ilegalidad de ese delito.
A mediados del mes de diciembre del año pasado, una mujer hondureña embarazada que al parecer había cruzado a pie la frontera fue atendida por los agente de CBP y trasladada a un centro médico donde dio a luz.
La agencia federal informó en aquel entonces que se había incrementado el número de cruces de inmigrantes con menores de edad en la frontera, derivado de la violencia y pobreza que se vive en sus países de origen, mayormente de Centroamérica que esperan en México una audiencia de solicitud de asilo.
Según informó en enero pasado el medio The Intercept, CBP expulsó del país en los últimos meses del año pasado a bebés recién nacidos en EEUU junto con sus madres, que eran inmigrantes indocumentadas que acababan de cruzar la frontera.