El miembro del grupo "The Greedy Souls", Jason Heath (c fondo), ensaya con los estudiantes reclusos el 30 de agosto de 2018 en el Centro de Rehabilitación de California en Norco, California. Por medio de la educación musical que provee la organización Jail Guitar Doors, reclusos del Centro de Rehabilitación de California, en la pequeña ciudad de Norco, reducen sus actitudes agresivas y como consecuencia aumenta la armonía dentro de la cárcel. EFE/Archivo

Los Ángeles – El Departamento del Alguacil del Condado de Orange (OCSD), California, no tendrá más inmigrantes detenidos en sus cárceles y dirigirá los recursos a la atención de presos con enfermedades mentales, según anunció hoy.

Ubicado al sureste de Los Ángeles, OCSD avanzó en un comunicado que a partir del 1 de agosto dedicará las instalaciones y los recursos que actualmente emplea con los detenidos de Inmigración a enfrentar los problemas de salud mental de los detenidos por autoridades locales.

Según dijo el alguacil Don Barnes, estos problemas han aumentado en un 40% desde 2015.

Aunque el contrato actual con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) finaliza en junio de 2020, OCSD decidió darlo por terminado anticipadamente.

«El número de casos de salud mental alcanza actualmente casi 1.800 en cualquier día», señaló Barnes.

«Consecuentemente, tenemos que enfocarnos en ampliar nuestro servicio de salud mental y expandir el número de camas disponibles para personas con necesidades (de este tipo)», agregó.

Según señaló OCSD, el 30% de los detenidos actuales que no proceden de la jurisdicción de ICE «requieren alguna forma de servicio de salud mental».

No obstante, el alguacil enfatizó que su departamento continuará trabajando dentro del entorno de la Ley SB 54, conocida también como el Acta de Valores de California o «ley santuario», «para asegurar que Inmigración reciba alertas cuando ofensores delincuentes serios y violentos sean dejados en libertad».

Sin embargo, la noticia no es favorable para los detenidos actuales que deberán ser trasladados a instalaciones donde haya cupo, quedando más alejados de sus abogados y familiares.

Debido a las restricciones que la Ley SB-54 estableció para la colaboración entre autoridades locales y de Inmigración, ICE tendrá que trasladar los detenidos actuales a instalaciones fuera del estado de California en un plazo de 120 días.

Actualmente, cerca de 900 detenidos están albergados en cárceles de OCSD, que estuvo colaborando en el alojamiento con Inmigración desde 2010.