Donald J. Trump, presidente de los Estados Unidos. EFE/Archivo

Washington – Tres comités de la Cámara Baja de EE.UU. solicitaron el lunes al Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) y a la Casa Blanca los documentos relacionados con la propuesta del presidente estadounidense, Donald Trump, de liberar a los indocumentados en las llamadas «ciudades santuario».

En una carta difundida este lunes, los Comités Judicial, de Supervisión y Reforma, y de Seguridad Nacional expresaron su preocupación por esa iniciativa, que atribuyen a «razones estrictamente políticas».

«Estamos profundamente preocupados por las múltiples informaciones, recientemente confirmadas por el presidente, de que la Administración Trump está considerando liberar a los inmigrantes detenidos en los distritos del Congreso representados por demócratas en un intento extraño e ilegal de obtener puntos políticos», señalaron los jefes de esos comités en la misiva.

Dichos comités están liderados por los demócratas Jerrold Nadler (Judicial), Elijah Cummings (Supervisión y Reforma) y Bennie Thompson (Seguridad Nacional).

En la nota, los dirigentes demócratas consideraron la propuesta de Trump como un plan para tratar a las familias y menores inmigrantes como «peones» en un juego político, y advirtieron que el Gobierno carece de autoridad legal para transferir a los detenidos de esta manera.

Además calificaron de «sorprendente» que el mandatario y altos funcionarios del Ejecutivo «estén incluso considerando manipular las decisiones de liberación por razones estrictamente políticas».

En ese contexto, y dada la «gravedad de la materia», los presidentes de los comités solicitaron documentos de entre el 1 de noviembre pasado y el 15 de abril de este año.

Entre otros, pidieron los correos electrónicos y otras comunicaciones entre la Casa Blanca y funcionarios del DHS, incluidos agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), relacionados con la transferencia o liberación -incluso potencial- de inmigrantes detenidos a ubicaciones específicas o áreas dentro de EE.UU.

También las comunicaciones entre miembros del DHS, así como entre funcionarios de esa agencia y del ICE.

De igual forma, requirieron todos los documentos del DHS, memorandos y otros materiales, incluidos borradores de estos, discusiones de políticas o justificaciones legales, así como implicaciones de la transferencia o liberación de inmigrantes detenidos a lugares o áreas dentro de EE.UU.

Este domingo, la Casa Blanca indicó que estaba estudiando cómo aplicar la propuesta de Trump de concentrar a los indocumentados en las llamadas «ciudades santuario», jurisdicciones duramente criticadas por el mandatario en sus más de dos años de gestión.

Estos territorios, que son más de 200 en todo el país, se niegan a colaborar con el Gobierno para deportar a los indocumentados.

La portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, aseguró el domingo que la propuesta busca liberar a las localidades fronterizas de la «carga» que supone el flujo de indocumentados que llegan a diario a la frontera con México.