Tegucigalpa – La corrupción y la impunidad que se cierne frente a la primera, se han convertido en los motores que impulsan los flujos migratorios desde Honduras, según el analista en temas internacionales Omar García.
Concluyó que la corrupción y la impunidad solo generan más pobreza y esta a su vez se convierte en exclusión en acceso al desarrollo.
Lo anterior se deriva en más flujos migratorios e índices de criminalidad, otra causa de la migración irregular.
En ese orden, recordó que según datos oficiales un cuarto de millón de hondureños ha sido desplazado internamente por la violencia.
Para evitar más flujos migratorios se debe establecer políticas públicas acorde a la realidad del país, recomendó.
Se debe entender que la cadena de causas de la migración empieza por combatir la corrupción y la impunidad, analizó.
Lamentó que los hondureños estén buscando la esperanza en otro país y eso es un claro ejemplo que no encuentra esperanza en la nación centroamericana.
Consideró que Honduras es un país rico con una gran proporción de tierra desocupada y con mucha gente desocupada, eso debe cambiar.
Dejó entrever que no existe una voluntad política por el alto nivel de remesas que se reciben y lo que estos significan para la economía nacional.