Tegucigalpa – Todos los sectores coinciden en que el presupuesto general de la República para el 2022, debe centrarse en educación, salud y reactivación económica, pero las interpretaciones si se cumplen, enfrentan al sector oficial con organismos especializados y economistas independientes.

Igualmente hay versiones encontradas sobre si el mismo será financiado con los recursos actuales o se necesitará de una nueva carga de impuestos y tasas para hacerlo efectivo o requerirá de mayor endeudamiento público.

El ejecutivo entregó el Presupuesto General 2022 al Congreso Nacional por un monto de 308 mil millones de lempiras, de los cuales más de 170 mil millones corresponden al gobierno central y el resto a las empresas y entidades descentralizadas.

El gobierno anunció que espera recaudar 115 mil 849 millones de lempiras en ingresos tributarios el año entrante.

El proyecto de presupuesto enviado al Congreso Nacional tiene un alza de 20 mil millones de lempiras respecto al que se ejecuta en el presente 2021, lo que ha llevado a jefes de misión de organismos especializados y a técnicos expertos a señalar que habrá un alza de impuestos o mayor endeudamiento para financiarlo, algo que rechazan desde el sector gubernamental.

El presidente del Banco Central de Honduras (BCH), Wilfredo Cerrato, dijo a periodistas que el proyecto presupuestario tendrá menores requerimientos de endeudamiento.

El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) estima que ese monto equivale casi a la mitad del producto interior bruto (PIB), ya que considera que es del 49 %.

Los economistas independientes también mostraron preocupación por el alto porcentaje que se destinará al servicio de la deuda pública en el presupuesto general, ya que representará más del 40 % de los ingresos, lo que imposibilita al gobierno dedicar más recursos a la salud y educación.

Salarios y deuda se comen casi todo

Julio Raudales, vicerrector para Asuntos Internacionales de la UNAH dijo que el 50% del presupuesto es para el pago de salarios.

El expresidente del Colegio Hondureño de Economistas (CHE), Julio Raudales, dijo que entre salarios y deuda pública se va casi todo el presupuesto, dejando poco espacio para inversiones y otros gastos.

Raudales, que se desempeña como vicerrector para Asuntos Internacionales de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), dijo que el 45 % del presupuesto será para pagar el servicio de deuda pública, mientras más del 50 % para el pago de salarios.

El economista dijo que el presupuesto es inflexible, por lo que llamó a repensar la forma en que se va a estructurar.

«Por más que tengamos la buena intención de mejorar la educación y la salud, no se podrá mientras no solventemos estos problemas de inflexibilidades en el presupuesto, porque vemos un presupuesto en donde más o menos el 45% de la recaudación tributaria se va al servicio de la deuda y el otro 55% en pago de sueldos y salarios, prácticamente nada queda para generar proyectos de bienestar», señaló.

Casi 200 mil empleados

La mayor parte del presupuesto general se va en el pago de sueldos y salarios

Según los datos proporcionados por la Secretaría de Finanzas a Proceso Digital, mensualmente se erogan 4 mil 73 millones de lempiras por concepto de salarios, que equivalen a más de 48 mil 800 millones de lempiras, más los pagos del décimo tercero y décimo cuarto mes, que suben a 57 mil millones de lempiras.

Para el 2022 el gobierno estima que este rubro se elevará a 60 mil 971 millones de lempiras.

El gobierno cuenta con un total de 195 mil 371 empleados públicos, de los cuales 60 mil 621 son docentes, 23 mil 280 son empleados de salud, 25 mil 264 miembros de las Fuerzas Armadas, 17 mil 836 son miembros de la Policía Nacional, los restante están distribuidos en las diferentes dependencias del Estado.

La mayor parte del presupuesto general se va en el pago de sueldos y salarios, por lo que los economistas reiteran que la carga pública se debe recortar.

CCIT pide priorizar salud y educación

Rafael Medina expresó que la estimación de la meta tributaria es alta y ambiciosa.

El director de la Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa (CCIT), Rafael Medina, señaló que el Presupuesto General de 2022 debe priorizar las áreas de salud y educación.

“Nosotros creemos que este presupuesto debe ser formulado de acuerdo a la situación económica, a la crisis sanitaria y de educación que vive el país”, dijo Medina.

Mencionó que la pandemia en Honduras no ha finalizado y que para el próximo año se debe potenciar la vacunación contra el COVID-19.

Prosiguió diciendo que en el presupuesto del próximo año deben ir incluidos los recursos para garantizar la presencia de una tercera dosis de vacuna.

Asimismo, Medina expresó que la estimación de la meta tributaria es alta y ambiciosa y anhela que las empresas cumplan con este apartado.

En tanto el representante del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Eduardo Almeida, dijo este jueves que Honduras debe priorizar su presupuesto en inversión y generar empleos, así como atender a las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes) que son las que crean alrededor del 70 % de los puestos de trabajo.

Agregó que también es importante que Honduras vuelva sus ojos a la educación de calidad, creando programas de tecnologías de la comunicación e información que capaciten a las nuevas generaciones.

Almeida indicó que más preocupante que la deuda del país representa el 60 % del PIB, el nuevo gobierno debe decantarse por hacer crecer el producto interno bruto para generar bienestar.

Presupuesto sin características distintas

Hugo Noé Pino señaló que se debe reducir el presupuesto de defensa, pues a su criterio, no tiene ninguna justificación.

Por su parte, el expresidente del Banco Central de Honduras Hugo Noé Pino señaló que el Presupuesto General de la República del 2022 no tiene características distintas a los que se han presentado en los últimos ocho años.

“Seguimos con las características que dado el endeudamiento de Honduras estamos destinando un gran capital al pago de la deuda externa, aproximadamente 40 mil millones de lempiras, más que lo destinado a salud y educación”, señaló el economista.

A su juicio se debe de priorizar en educación y salud, además de reducir el presupuesto de defensa, pues a su criterio, no tiene ninguna justificación.

Hay que condicionarlo

Jefe del Departamento de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras Henry Rodríguez

Para el jefe del Departamento de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras Henry Rodríguez, el incremento del presupuesto es necesario, pues de lo contrario se hace más lento el proceso de recuperación de la economía, sin embargo, señaló que es ineludible condicionarlo, pasando por la transparencia, rendición de cuentas y reorientarlo hacia la recuperación económica.

Rodríguez comentó que el nuevo gobierno tendrá que definir cómo financiará este nuevo presupuesto ya que, si se continúa con la misma estructura fiscal y niveles de recaudación, los escenarios son dos: mayor endeudamiento o modificación en las tasas de impuestos.

Si la economía no se recupera, el nuevo gobierno se verá en la necesidad de incrementar sus ingresos vía un nuevo paquetazo, lo que significará deprimir más el consumo de la población trabajadora y restarle posibilidades de incremento de la producción a la empresa privada, lo que nos pone en una situación muy compleja, lamentó el académico.

Para el experto, las principales acciones que debe emprender el próximo gobierno es poner en marcha un plan de rescate de la economía que debe responder a la realidad del país, de acuerdo con los ingresos que tendrá el gobierno, además de generar políticas públicas para el fomento de la inversión productiva de la empresa privada.