Tegucigalpa – Una oscura realidad pocas veces visibilizada ante medios de comunicación  autoridades gubernamentales, son las conclusiones a las que llegan decenas de usuarios de redes sociales luego que se difundieran crudas imágenes de un supuesto secuestro de una familia hondureña a manos del Cártel del Golfo en México.

-Pese a los peligros de la travesía anualmente unos 100 mil hondureños emprenden la ruta migratoria en busca de una mejor vida.

A través de redes sociales se difundieron imágenes de un supuesto secuestro de hondureños a manos del Cártel del Golfo y aunque la información no ha sido confirmada tanto por autoridades mexicanas como hondureñas, las gráficas han generado indignación entre los usuarios que concluyen se trata de una oscura realidad que viven los migrantes hondureños a su paso por suelo azteca.

Esta imagen ha circulado en las distintas redes sociales en las que se observa a varias personas secuestradas.

Esta semana un caso de secuestro causó indignación entre usuarios de redes sociales, pues se dio a conocer que un hondureño, identificado como Carlos Dueñas, y su pequeño hijo, ambos originarios de Isletas, Colón, fueron raptados por un grupo criminal junto con otros centroamericanos.

De acuerdo con el post, en el que se aprecia a varias personas semidesnudas y atadas de pies y manos, los secuestradores afirmaron pertenecer al Cártel del Golfo y exigieron a las familias la cantidad de 7 mil dólares (aproximadamente 170 mil lempiras) para liberar con vida a sus víctimas.

Según la publicación, los secuestrados partieron en una de las caravanas que llevaban como destino Estados Unidos, pero cayeron en las manos equivocadas; sin embargo, hasta el momento el caso no ha sido confirmado por las autoridades.

Datos de Naciones Unidas señalan, que cada año más de 500 mil personas cruzan de manera irregular la frontera sur de México para llegar a Estados Unidos; de entre ellas, al menos 100 mil son hondureños que huyen de la violencia y la pobreza.

En la imagen un padre junto a su hijo supuestamente de nacionalidad hondureña mientras permanecen privados de libertad.

Si bien en los últimos meses la política migratoria de México ha dado un giro al otorgar una visa humanitaria a los hondureños que la han solicitado con la que pueden transitar y trabajar en ese país por un año, la travesía continúa representando los mismos peligros para los migrantes en tránsito.

El secuestro de parte de grupos organizados es solo uno de los peligros que deben sortear los migrantes hondureños en su afán por alcanzar el denominado “sueño americano”.

Uno de los principales grupos organizados en el secuestro y extorsión de migrantes es el Cártel del Golfo tradicionalmente dedicado a contrabando de drogas y en la extracción de hidrocarburos

El Cartel del Golfo es considerado como la primera organización criminal de México, se fundó en 1930 para traficar alcohol a los Estados Unidos durante la época de la prohibición, sin embargo, su forma de operar ha evolucionado y una de actuales actividades es el secuestro de migrantes.

A su vez este cártel se fragmenta en siete células (Los Rojos, Los Metros, Los Fresitas, Los Dragones, Los Ciclones, Los Pelones y Los Talibanes) las que mantienen a la organización en el negocio del contrabando y les permite incursionar en otros delitos como el secuestro y extorsión.

Es precisamente en estos dos últimos delitos en los que principalmente los hondureños son víctimas, aunque los casos son pocos visibilizados ya que los familiares temen interponer un denuncia por lo que los secuestro suelen manejarse al interno de la familia de la víctima y lejos del conocimiento de las autoridades.

Pese a todos los peligros que enfrentan los inmigrantes a su paso por México, miles de hondureños emprenden la ruta migratoria cada año en busca de una mejor vida.

 Son la falta de empleo y de generación de oportunidad, el huir de la violencia y la reunificación familiar las principales causas de emigración en el país centroamericano.