Una persona introduce su boleta de voto en una máquina de votos en Washington, D.C. (EE.UU.). EFE/Lenin Nolly/Archivo

Atlanta (GA) – Un grupo de derechos civiles anunció este martes que ha presentado una demanda contra Gwinnett, el condado de Georgia con más hispanos, luego de que las autoridades de esa localidad incumplieran con ley federal al no enviar solicitudes de boletas de voto ausente en español a los residentes.

Con la acción legal, las organizaciones exigen al condado que proporcione «lo antes posible» las boletas bilingües a los residentes que hablen español para que puedan ser utilizadas en las elecciones primarias de Georgia que están previstas para el 9 de junio luego de que fueron aplazadas por la pandemia del coronavirus.

La demanda fue presentada en un tribunal federal por el grupo Lawyers’ Committee for Civil Rights Under Law y el bufete de Bryan Sells LLC, en nombre de la Asociación de Funcionarios Latinos Electos de Georgia (GALEO), Georgia Coalition for the People’s Agenda, Asian Americans Advancing Justice – Atlanta, New Georgia Project y Common Cause.

De acuerdo con los demandantes, 14.000 ciudadanos del condado tienen más de 18 años, la edad mínima para votar, hablan de manera fluida el idioma español y tienen un dominio limitado del inglés.

Según datos del Censo, el 22 % de la población del condado es de origen latino.

«La Sección 203 (de la Ley de Derecho al Voto) protege el derecho al voto de todos los electores que hablen español en el condado de Gwinnett, sin importar quién envía la información electoral», afirmó Jerry Gónzalez, director ejecutivo de GALEO, uno de los grupos que participó en la acción legal.

La Secretaría de Estado y el condado de Gwinnett tienen la responsabilidad de asegurarse de que proveen acceso igualitario a todos los votantes, «pero incumplieron al no hacerlo con la solicitudes de boletas de voto ausente», agregó González.

El director ejecutivo de GALEO añadió que debido a que se ha postergado la fecha de las elecciones primarias para el 9 de junio, las autoridades tienen tiempo suficiente para «corregir su error y mandar aplicaciones bilingües y boletas para cumplir con la ley federal».

La ley federal obliga a proveer boletas bilingües a los electores cuando más de un 5 por ciento o 10.000 personas en edad de votar son miembros de un grupo minoritario y tienen un dominio limitado del inglés.