Tegucigalpa – El creciente desempleo afecta de forma directa a la juventud de Honduras cuya población está constituida en un 59.34 % por gente menor de 30 años, al 2021, según datos demográficos. Los jóvenes no creen que pueden cumplir sus objetivos económicos en el país y la falta de empleo se convierte en un motor que constantemente alimenta la idea de emigrar.
-Un 52 % de los encuestados dijo que sí tiene un familiar que emigró en el último año, lo que revela un dato mayor entre la percepción de quienes quieren irse y de quienes concretan ese deseo.
-El 66.1 % de los encuestados señaló que desea emigrar por el desempleo y por la falta de oportunidades en Honduras.
-De acuerdo a los censos poblacionales Honduras tendrá en 2045 la mayor cantidad de personas en edad productiva de su historia.
Es así que el desempleo y la falta de oportunidades es el motor que alimenta el deseo de migrar de los hondureños, concluyó en entrevista con Proceso Digital el sociólogo e investigador del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación (ERIC) de la Compañía de Jesús, Elvin Hernández.
El sociólogo señaló que en el año 2022 el 41.1 % tenía el deceso de emigrar mientras que en el 2023 la cifra aumentó a 48.4 %, lo que quiere decir que de cada 100 hondureños 48 piensan o desean emigrar.
Lo anterior se plasma en el sondeo de opinión pública del ERIC presentado recientemente en las principales ciudades del país.
Expectativas de un gobierno
El aumento del deseo de emigrar de los hondureños tiene que ver con la expectativa que generó la transición hacia un nuevo gobierno, razonó el investigador.
Cuando se realizó el trabajo de campo en el año 2022 el gobierno apenas tenía dos meses de haber asumido, pero en esta ocasión ya se trabajó con más de un año de gobierno.
El aumento se debe a la expectativa que generó el cambio de gobierno, muchos pensaron que existiría empleo y no fue así y eso hace que los jóvenes busquen otros países para cumplir con sus objetivos.
Existe una dimensión política, económica y social que genera una crisis en el país y eso se traduce en falta de empleo y esto a la vez un motivante para que más jóvenes se quieran ir del país, caviló.
Jóvenes, los que más emigran
De acuerdo a los datos concluyentes del sondeo de opinión pública cada año ingresan al mercado laboral entre 90 y 120 mil jóvenes, es decir menores que crecen y cumplen la edad para poder ingresar al mundo laboral.
Sin embargo, el mercado laboral hondureño solo tiene la capacidad de absorber a 30 mil de estos nuevos obreros, comentó el sociólogo.
Lo anterior revela un enorme desafío para el país, pero también demuestra que quienes ya trabajan no cuentan con un ingreso digno que permita al núcleo familiar poder contar con el nivel básico de adquisición, agregó.
Los datos revelan que la principal fuerza de trabajo, es decir los jóvenes, se están yendo, zanjó.
Que los jóvenes de Honduras estén emigrando es una factura que la podemos pagar caro a corto o mediano plazo, advirtió.
Signos de una crisis
Honduras ya empieza a ver consecuencias de los flujos migratorios irregulares de jóvenes.
Por ejemplo en la zona rural ya no se encuentra personal para cortar café, se debe hacer uso de jóvenes de países vecinos, expuso.
Lo mismo sucede en otros rubros como en la construcción y ganadería, entre otros, añadió.
Lo anterior tiene que ver con que la gente prefiere hacer un esfuerzo, endeudarse y buscar oportunidades en otro país.
La juventud está dejando de creer en el país
Los jóvenes simplemente se van o emigran de forma irregular porque ya no creen en el país, apuntó Hernández.
Según información del Cohep, en Honduras casi un millón de jóvenes de entre 12 y 30 años no estudian ni trabajan.
De acuerdo al Censo Poblacional del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Honduras tendrá en 2045 la mayor cantidad de personas en edad productiva de su historia.