Fotografía cedida por la Guardia Costera estadounidense donde se muestra la patrulla costera de la Armada de la República Dominicana, "Bellatrix" (CG-106), mientras lleva a los 52 migrantes que estaban a bordo de un barco de fabricación casera durante un viaje ilegal este 13 de noviembre de 2019 en el pasaje Mona, entre el este de República Dominicana y el oeste de Puerto Rico. EFE/Guardia Costera EE.UU

San Juan – La Guardia Costera de EE.UU., la Unidad de Aduanas y Protección Fronteriza federal y las unidades aéreas y de superficie de la armada de la República Dominicana interceptaron este miércoles a 52 migrantes a bordo de un barco de fabricación casera durante un viaje irregular el miércoles en el pasaje Mona.

El pasaje de Mona se encuentra entre el este de República Dominicana y el oeste de Puerto Rico.

El grupo de migrantes incluía a 51 ciudadanos de la República Dominicana y uno cubano, 39 hombres y 13 mujeres, que fueron devueltos a la República Dominicana de manera segura, informó este jueves en un comunicado la Guardia Costera.

La interdicción fue el resultado de esfuerzos continuos en apoyo de la Operación Guardia del Caribe y el Grupo Interagencial Fronterizo del Caribe (CBIG).

«La estrecha colaboración y la comunicación efectiva entre la Guardia Costera, la Aduana y Protección Fronteriza y los activos de respuesta de la Armada de la República Dominicana condujeron a la interdicción y la recuperación segura de los 52 migrantes», dijo el Comandante Beau Power, jefe de respuesta del Sector San Juan.

«No deben embarcarse en el mar como parte de un viaje de inmigrantes ilegales, son extremadamente peligrosos. A menudo, como en este caso, se realizan a bordo de embarcaciones improvisadas muy sobrecargadas y poco aptas para navegar que podrían volcar fácilmente y tener poco o nada de equipo para salvar vidas», subrayó.

La interceptación tuvo lugar el miércoles por la mañana, después de que una tripulación de la patrulla marina DHC-8 de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) divisara una embarcación de migrantes, aproximadamente a 15 millas náuticas (unos 27,7 kilómetros) al noroeste de la isla de Mona, Puerto Rico.

Los vigilantes de la Guardia Costera en el Sector San Juan desviaron a la embarcación «Donald Horsley» para llevar a cabo la interdicción y alertaron a las autoridades de la Armada de la República Dominicana, quienes también desviaron a la patrulla costera de la Armada de la República Dominicana, «Bellatrix» (CG-106), al lugar.

El «Bellatrix» detuvo el barco migrante y, poco después, el «Donald Horsley» ayudó con la transferencia y el traslado seguro de los migrantes al «Bellatrix» para su regreso a la República Dominicana.