San Salvador,.- El Gobierno de Estados Unidos aceptó las cartas credenciales de la nueva embajadora de El Salvador en el país norteamericano, Milena Mayorga, reconocida por sus mensajes de apoyo al militar acusado de encabezar en el terreno la masacre de unos 1.000 campesinos en El Mozote (1981), el fallecido Domingo Monterrosa.

La Presidencia de El Salvador informó en un comunicado que la carta de aceptación fue firmada por el presidente Donald Trump el pasado 23 de diciembre, por lo que «ahora la embajadora Mayorga inicia su misión de representar a El Salvador ante las autoridades estadounidenses», indicó.

De acuerdo con la nota de prensa, Trump dio la bienvenida a Mayorga como miembro del cuerpo diplomático en Washington y expresó el deseo de su Gobierno de «avanzar en una agenda común y de profundizar la amistad, fuerte y duradera, entre ambos países».

En noviembre pasado, Mayorga explicó que su trabajo en Estados Unidos se centrará en atraer inversión, evitar la migración irregular y buscar alternativas para los beneficiarios del Estatus de Protección Temporal (TPS).

La funcionaria añadió, sin explicar el origen de la información, que el 50 % de los salvadoreños que es residente en el país norteamericano desea regresar a El Salvador.

Mayorga, expresentadora de televisión, era antes de su nombramiento como embajadora una diputada disidente de la opositora Alianza Republicana Nacionalista (Arena, derecha), partido que no le permitió buscar la reelección.

«Existen personas que nunca mueren, pues se convierten en mitos y leyendas. Hoy se celebra el natalicio del Coronel Domingo Monterrosa», publicó la nueva embajadora en agosto de 2018 en sus redes sociales.

En mayo de 2017, también publicó en Twitter una fotografía del militar para recordar «a un héroe que dio su vida por la patria» y añadió «¡Coronel Domingo Monterrosa al frente de la batalla!».

La derecha en El Salvador tiene al difunto teniente coronel Domingo Monterrosa como un héroe de guerra, que fue asesinado por la guerrilla en 1984.

En una histórica declaración ante el tribunal que lleva el proceso penal por la masacre de El Mozote, el general retirado y procesado por la matanza Juan Rafael Bustillo atribuyó la masacre a una locura momentánea de Monterrosa.

El Informe de la Comisión de la Verdad de la ONU de 1993, que da cuenta de las violaciones a derechos humanos durante la guerra civil (1980-1992), señala que Monterrosa era el comandante del élite Batallón Atlacatl, cuyos miembros perpetraron la masacre en diciembre de 1981.

El militar también es vinculado a la masacre conocida como de El Calabozo en 1982.

El referido informe apunta que el 7 de agosto de 1982 el Batallón Atlacatl comenzó un «vasto operativo militar antiguerrillero» con unos 6.000 hombres que terminó con la masacre de 200 civiles en el lugar conocido como El Calabozo.

Ambas masacres eran parte de una estrategia de tierra arrasada del Ejército salvadoreño en los primeros años del conflicto armado, que duró 12 años y dejó 75.000 muertos y 8.000 desaparecidos.