Washington – El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, atribuyó este martes el incremento de la migración ilegal en la frontera sur de Estados Unidos a la «violencia, los desastres naturales, la inseguridad alimenticia y la pobreza» en América Central y México.

Mayorkas compareció ante el Comité de Seguridad Nacional del Senado en una audiencia para analizar el pedido de recursos de su agencia en el presupuesto para el período fiscal 2022 que comienza el 1 de octubre.

El senador Bob Portman, de Ohio y el republicano de mayor jerarquía en el comité, advirtió que la migración ilegal «ha estado aumentando cada mes desde la inauguración» del gobierno del presidente Joe Biden el 20 de enero.

«Está en marcha un aumento de la migración que ha llegado a los niveles más altos en dos décadas», agregó Portman. «El presidente Biden dijo que se trataba de un fenómeno estacional, que se moderaría con el verano».

«Pero estamos en el verano y (los migrantes) siguen llegando. No nos preparamos en forma alguna y el gobierno está abrumado por el arribo de menores sin compañía de adultos responsables y de familias» añadió el senador republicano.

Cerca de 189.000 indocumentados fueron detenidos en junio pasado en la frontera sur de EE.UU., lo que representó un incremento del 4,5 % sobre las cifras del mes anterior, que había supuesto un récord histórico de más de dos décadas, y todo a pesar de las altas temperaturas que deben sufrir los inmigrantes que cruzan de manera irregular la frontera.

Mayorkas señaló que, además de las condiciones que han llevado a millones de migrantes a abandonar sus países, el gobierno ha tenido que lidiar con la pandemia global de covid-19.

«Y encima de estos desafíos estuvo la falta de planificación de largo plazo y de un marco estratégico integral por parte del gobierno anterior», añadió Mayorkas.

El gobierno del ex presidente Donald Trump «terminó el programa para menores centroamericanos y cortó cientos de millones de dólares en ayuda a Guatemala, El Salvador y Honduras», dijo el funcionario.

«Dicho de forma simple, el gobierno anterior desmanteló el sistema de inmigración de nuestro país», agregó Mayokas.

La propuesta de presupuesto del presidente Biden incluye 1.200 millones de dólares para la modernización de los controles en los puntos de ingreso a Estados Unidos, de los cuales 655 millones de dólares irán para el mejoramiento de los puertos de ingreso terrestres.

«El presupuesto incluye un incremento del 50 % para los servicios de trámites dentro del programa de alternativas a la detención del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE), explicó Mayorkas.

Asimismo la solicitud al Congreso de fondos para el DHS comprende 345 millones de dólares para la contratación de más personal, la adquisición de equipos y servicios de apoyo para el sistema de inmigración.

«Estas mejorías darán los recursos para reducir el atraso en los trámites y permitirán que el Servicio de Inmigración y Ciudadanía pueda fortalecer su capacidad de entrevistas a fin de cumplir con la meta del gobierno de aceptar hasta 125.000 refugiados cada año», indicó.

Otros 163 millones de dólares pedidos al Congreso estarán destinados a los servicios médicos que se brindan a los migrantes detenidos por la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP), dijo Mayorkas.