Tegucigalpa – El Departamento de Seguridad Nacional (DHS), en consulta con el Departamento de Trabajo (DOL), anunció que emitirá una regulación que pondrá a disposición de los empleadores 64 mil 716 visas temporales H-2B adicionales para trabajadores no agrícolas para el año fiscal 2023, acción que beneficia a los países del Triángulo Norte de Centroamérica y Haití.
El gobierno de Honduras alabó la acción y expresó que se trata de mecanismos positivos de migración regular que beneficiarán al país centroamericano.
Así lo manifestó el canciller de la República, Enrique Reina, quien agradeció al gobierno de Estados Unidos la decisión.
“Recibimos con beneplácito el anuncio de @DHSgov de los EEUU de incrementar en 64,716 las visas #H2B destinadas a ciudadanía de Honduras, Guatemala y El Salvador con programas de migración circular temporal. Son mecanismos positivos de migración regular que beneficiarán a Honduras”, escribió en su cuenta de Twitter el canciller hondureño.
El programa H-2B permite a los empleadores contratar temporalmente a personas que no son ciudadanas para realizar trabajos o servicios no agrícolas en los Estados Unidos.
Además de las 20 mil visas reservadas para ciudadanos de Haití y los países del norte de América Central, las 44 mil 716 visas suplementarias restantes estarán disponibles para los trabajadores que regresan y que recibieron una visa H-2B, o se les otorgó el estatus H-2B, durante uno de los últimos tres ejercicios fiscales.
Lo anterior significa que se asignará estas visas complementarias restantes para trabajadores que regresan entre la primera y la segunda mitad del año fiscal para cubrir la necesidad de trabajadores temporales adicionales en el transcurso del año, con una parte de la asignación de la segunda mitad reservada para cumplir con la demanda de trabajadores durante la temporada alta de verano.
Es oportuno mencionar que la cantidad de visas temporales está disponible para los países en mención durante el año fiscal 2023 que inició el pasado 01 de octubre.
Para poder beneficiar a los trabajadores centroamericanos, los empleadores deben certificar que el empleo de trabajadores H-2B no afectará negativamente los salarios y las condiciones de trabajo de los trabajadores estadounidenses empleados de manera similar.