Washington – El presidente estadounidense, Donald Trump, celebró este sábado el acuerdo alcanzado ayer con México para expandir el programa que obliga a quienes solicitan asilo en EEUU a esperar en el país vecino hasta que se resuelvan sus casos, un mecanismo cuyo futuro depende de un tribunal federal en California.
En una serie de tuits, Trump aseguró que «todo el mundo está muy entusiasmado» con el pacto bilateral sobre inmigración, que convenció al presidente de EEUU de suspender indefinidamente su plan de imponer aranceles a todas las importaciones mexicanas, un castigo que iba a entrar en vigor el próximo lunes.
«¡Me gustaría dar las gracias al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y a su ministro de Exteriores, Marcelo Ebrard, junto con los muchos representantes tanto de Estados Unidos como de México, por trabajar tan larga y duramente para completar nuestro acuerdo sobre inmigración!», escribió Trump en su cuenta de Twitter.
El pacto, fruto de una semana de intensas negociaciones en Washington para evitar la imposición de los aranceles, incluye un acuerdo para que EEUU expanda su programa «Permanezcan en México», también conocido como Protocolo de Protección de Migrantes (PPM).
Esa iniciativa -por la que EEUU devuelve a México a los solicitantes de asilo que llegan a su frontera mientras se tramitan sus peticiones- empezó a aplicarse este año en un solo punto de entrada, en San Diego (California), y a partir de marzo se amplió a otros dos, en Calexico (California) y El Paso (Texas).
El acuerdo recién alcanzado implica que se «expandirá la implementación» de ese programa «a lo largo de toda la frontera», según el comunicado conjunto de ambos países.
Eso podría obligar a decenas de miles de inmigrantes, en su mayoría centroamericanos, a aguardar en México a que los tribunales de inmigración estadounidenses decidan sobre su solicitud de asilo, un proceso que puede durar meses o incluso años.
El Gobierno mexicano se ha comprometido a proporcionar «empleo, cuidados de salud y educación» a esos inmigrantes, algo que promete plantear desafíos logísticos, porque solo desde que comenzó a aplicarse el programa, México ya ha recibido a un total de 10.393 solicitantes de asilo en EEUU, según fuentes oficiales mexicanas.
La presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, la demócrata Nancy Pelosi, se mostró hoy preocupada por el impacto que tendrá ese acuerdo.
«Estamos profundamente decepcionados por la expansión del Gobierno de su fracasada política de ‘Permanezcan en México’, que viola los derechos de los solicitantes de asilo bajo la ley estadounidense y no hace frente a las causas de raíz de la inmigración desde Centroamérica», dijo Pelosi en un comunicado.
Las autoridades migratorias de EEUU no han dado detalles de cuándo comenzará la expansión del programa, y algunos activistas están preocupados por la posibilidad de que llegue a la zona oriental de la frontera y obligue a algunos inmigrantes a esperar en Tamaulipas, considerado uno de los estados más peligrosos de México.
Sin embargo, una corte de apelaciones en San Francisco (California, EEUU), examina desde abril la legalidad del programa PPM, y existe la posibilidad de que decida paralizarlo.
«Seguimos con nuestro litigio contra esa política ilegal», dijo este viernes Omar Jadwat, director del programa de derechos de los inmigrantes en la organización de derechos civiles ACLU.
Esos matices no aguaron la celebración de Trump, quien pronosticó que, si México se «esfuerza mucho» en contener la inmigración en su frontera con Guatemala y en albergar a los solicitantes de asilo en el norte del país, «este será un acuerdo muy exitoso».
El presidente también aseguró que México «ha accedido a empezar inmediatamente a comprar grandes cantidades de productos agrícolas» de EEUU, que en 2018 ya exportó 20.000 millones de dólares en maíz, soja, carnes y otras materias primas al país vecino.
Ese presunto acuerdo no estaba incluido en el comunicado conjunto, y Trump no aclaró si forma parte del pacto.
Aunque su amenaza de aranceles puso en duda el futuro del acuerdo comercial T-MEC entre EEUU, México y Canadá, que reemplazaría al TLCAN si es ratificado en los tres países, Trump urgió hoy al Congreso estadounidense a retomar el proceso para implementarlo.
«¡(El T-MEC sería) Muy bueno para nuestros agricultores, sector manufacturero y sindicatos!», insistió Trump en Twitter.