Túnez – El Banco Mundial (BM) otorgará un préstamo a Túnez por valor de 13 millones de euros para financiar la compra de tratamientos y equipos médicos para luchar contra la pandemia causada por el COVID-19, que oficialmente ha causado 18 muertos y 495 contagiado en este país norteafricano.

Según la agencia estatal TAP, el ministerio de Sanidad podrá acceder al crédito tras la reestructurar los proyectos agrícolas financiados por el mismo organismo.

El anunciollegó un día después de que el representante del BM en Túnez, Tony Verheijen, se reuniese con el ministro de Agricultura y Pesca, Oussema Khereiji, que destacó la necesidad de acelerar la aplicación de las medidas económicas y sociales anunciadas por el Gobierno para paliar la crisis sanitaria.

El organismo hizo público este viernes un nuevo mecanismo de financiación acelerada por valor de 1.600 millones de dólares durante los próximos 15 meses con el objetivo de ayudar a los Estados a luchar contra la epidemia, que suma ya más de un millón de contagios y 59.000 fallecidos en el mundo.

El primer ministro tunecino, Elyes Fakhfekh, dijo recientemente que el país se encuentra «por el buen camino» y anunció nuevas ayudas a 130.000 pensionistas que cobran menos de 180 dinares (57 euros) e indemnizaciones de 64 euros para aquellos trabajadores que se encuentre en paro técnico.

Para paliar las consecuencias en la frágil economía tunecina, el Gobierno puso en marcha un paquete de medidas económicas y sociales por un valor de 800 millones de euros que incluyen aplazar el reembolso de préstamos para los sueldos inferiores a 1.000 dinares (320 euros), ayudas para trabajadores en «paro técnico» y colectivos desfavorecidos así como un fondo para reforzar la reserva de medicamentos, productos alimenticios y carburante.

Una semana antes, la Unión Europea concedió un paquete de ayudas de 250 millones de euros mientras que el Ejecutivo continúa negociando con el Fondo Monetario Internacional (FMI) un crédito de 360 millones de euros, ambos destinados a la lucha contra la propagación del COVID-19.

Desde el pasado 22 de marzo, Túnez decretó el cierre total y el confinamiento en el país, además de un toque de queda entre las 18.00 hora local (17.00 GMT) y las 06.00 de la mañana (05.00 GMT) y la prohibición de reuniones de más de tres personas en la vía pública.